Almussafes homenajea a uno de sus maestros más longevos, Miguel Ángel Calabuig Esplugues, que se incorporó al centro educativo CEIP Almassaf en septiembre de 1985, dedicando los últimos 26 a su labor como director del mismo. Así, el claustro del colegio se reunió el pasado sábado 19 de diciembre en un restaurante de la localidad para celebrar el acto. Sus compañeros en activo, así como los que se han jubilado durante los últimos años, quisieron brindarle una fiesta de despedida, a la que también asistieron los maestros jubilados del CEIP Pontet, entre ellos su antiguo director, Miguel Ángel Aragón, así como la actual directora del colegio, Estefanía Pastor, y el director del López Marco de Sollana y vecino de Almussafes, Francisco José López.
Aunque Almussafes no fue su primer destino como docente, puesto que previamente ejerció su profesión en Córdoba, Tarragona y también Carlet, el CEIP Almassaf ha sido la escuela en la que Miguel Ángel Calabuig Espluges ha escrito las mejoras páginas de su historia laboral, compartida estrechamente con su esposa y también profesora del colegio desde el año 1985, Inmaculada Martí.
El homenajeado fue elegido director durante el curso 1989-1990, pero esta responsabilidad no le ha impedido impartir algunas clases, mayoritariamente de Ciencias Sociales, en grupos compartidos con otros miembros de los diferentes equipos directivos que le han acompañado al frente del colegio durante los últimos 26 años. El primero de ellos, integrado por María José Andrés y Josefa Bataller, como jefa de estudios y secretaria, respectivamente, trabajó con una nueva y mayor preocupación por el valenciano en la escuela, incorporando materiales de gran utilidad para los alumnos y los padres, como las “agendas escolares” y los “boletines informativos”, ambos elementos de periodicidad anual y plenamente consolidados en el centro educativo.
Su trayectoria como docente le ha reportado a Miguel Ángel grandes experiencias y una primera década como director definida por la lucha por los derechos de los alumnos, puesto que tuvo que lidiar con muchas reivindicaciones ante las autoridades con la finalidad de adaptar los edificios de la antigua escuela a la normativa regulada por la nueva legislación, una acción que tuvo finalmente su recompensa con la inauguración del nuevo edificio educativo, en el año 2001.
Durante los 26 cursos completos y un trimestre como director, ha contado con la inestimable colaboración de otros compañeros en el ejercicio de las tareas directivas, como José Luís Ull, José Candel, Sergi Silvestre y Amparo Medina, además del primer equipo citado con anterioridad, labor que en todo momento se ha desarrollado en buena armonía y en un clima de compromiso en el que siempre han colaborado todos los docentes, en pro del correcto funcionamiento del colegio.