La Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio ha adjudicado por 767.650,33 euros las obras del carril bici al Port de Catarroja en el Parque Natural de la Albufera.
En la actualidad, el acceso al Port se realiza desde el casco urbano de Catarroja por la calle Cami de Port del polígono industrial «El Bony» hasta la carretera V-31, que cruza por un paso inferior de doble sentido de circulación. Una vez atravesada la V-31, se llega hasta el Port por la carretera CV-4120, de titularidad municipal.
La solución que proyecta la Conselleria de Obras Públicas para mejorar el acceso al Port consiste en un carril bici de doble sentido de circulación desde la estación de Renfe de Catarroja.
Para poder efectuar esta obra será necesario ejecutar diversas actuaciones constructivas. Así, en el tramo que afecta al polígono industrial de «El Bony» se adecuará la calzada y las aceras para la ejecución del carril bici, se redistribuirá el sentido del tráfico, así como su iluminación y señalización, y se mejorará el paso inferior de la V-31. También, en el tramo que discurre paralelo a la CV-4120, se creará una nueva estructura que generará el espacio necesario para ubicar el carril bici, cuyo trazado será independiente de la carretera de tráfico rodado.
En este segundo nivel, este se ejecutará con dos tipologías constructivas diferentes. El inicio consistirá en una plataforma apoyada sobre pilares que permitan que la acequia que discurre paralela a la carretera quede camuflada debajo del carril bici, Más adelante, la plataforma ciclista se apoyara sobre la estructura de la carretera volando sobre la acequia hasta llegar al final de la actuación.
La implantación de la nueva estructura afectará a los campos de cultivo adyacentes a la vía ciclista, para lo cual será necesario realizar actuaciones de reposición en la red de acequias y los caminos de acceso a los mismos.
De esta manera, el nuevo Gobierno valenciano asegura que “da prioridad a la movilidad sostenible entre la ciudad y la huerta acercando los paisajes a los ciudadanos y se lleva a cabo, por tanto, una política de movilidad basada en un uso más racional del vehículo privado”. Además, desde Obras Públicas destacan el objetivo de “reducir del ruido; la contaminación atmosférica; la consideración de la calle como un espacio de convivencia; el uso eficiente de la energía; la prioridad de los viajes a pie, en bici o en transporte público y la reducción del número de viajes mecanizados indeseados que permite un modelo de ciudad compacta mediterránea sin segregación de usos y actividades”.
No obstante, entre las prioridades del nuevo Consell, señalan, está la de “impulsar políticas de movilidad seguras, no discriminatorias y respetuosas con el medio ambiente, donde el papel asignado a la bicicleta es cada vez más creciente tanto en su vertiente ocio como en su vertiente trabajo, estudio o gestiones”.