Los contenedores de reciclaje de Almussafes se llenan de flores y es que el consistorio municipal inicia un proyecto de renovación de la imagen de las islas ecológicas de la localidad.
Cuatro estudiantes de Bellas Artes de Almussafes, contratadas para pintar a mano los contenedores.
Reciclar y cuidar el medio ambiente va a ser mucho más divertido en Almussafes a partir del próximo 28 de julio, fecha en la que concluirá la primera fase del proyecto de remodelación de la imagen de las primeras 9 de las 25 islas ecológicas existentes en la población. El ayuntamiento financia la actuación, que se inauguró el pasado 1 y que consiste en la decoración los contenedores de envases ligeros, papel y vidrio por parte de cuatro jóvenes de la localidad, estudiantes de Bellas Artes. La intervención en los puntos de reciclaje se completará en una segunda fase, que se desarrollará el próximo año.
Aumentar la recogida selectiva en Almussafes, desarrollar el talento artístico de los jóvenes del municipio y solucionar los problemas de deterioro que afectaban a buena parte de los contenedores de reciclaje por estar sometidos al efecto de los rayos solares son las tres premisas sobre las que se sustenta esta iniciativa, impulsada y sufragada por el Ayuntamiento de Almussafes.
Las estudiantes de Bellas Artes, Belén Guixot, Jasmina Moscardó, Mar Reig y Amelia Soler forman el equipo de trabajo que, desde el pasado día 1 de julio, se responsabiliza de la renovación de la imagen externa de las nueve islas ecológicas incorporadas en la primera fase de ejecución del proyecto. De hecho, las zonas de reciclaje instaladas en el centro del núcleo urbano y en las inmediaciones del CEIP Pontet han sido los puntos elegidos para iniciar la iniciativa, que concluirá el próximo año 2017.
La temática elegida por las jóvenes artistas ha sido la naturaleza y más concretamente, las flores, aunque tal y como explican, “cada contenedor es único y se trata de manera individual”.
En cuanto a la técnica aplicada para el desarrollo del proyecto, en una primera acción, las diseñadoras actúan sobre la base del contenedor, cubriéndolo con pintura de esmalte de color azul, verde o amarillo, dependiendo del uso específico reglamentario de cada depósito. A continuación, la pintura de spray es la elegida para crear la base de las flores, que se rellenan finalmente con rotuladores esmaltados. Así pués han quedado unos bonitos contenedores de reciclaje.