A manager nuevo, victoria segura

Rufete se quedó en casa, con las montañas de deberes que tiene por delante recién estrenado su cargo de manager general deportivo, pero su fantasma flotó por Gales en la previa, durante y en el post partido europeo del Valencia. Esa competición que ahora mismo es lo más similar a un oasis de felicidad en esta temporada tan agitada.

El que sí que se dejó ver, cambiando los planes previstos, fue el presidente Amadeo Salvo. Pero tranquilos, que él no fichó a Djukic y no es decisión suya echarlo, así que el serbio dirigió con algo más de tranquilidad el partido en el Liberty Stadium. Pero está claro que la procesión va por dentro, y así se comprobó cuando liberó kilos y kilos de tensión con el 0-1 de Parejo. Gol celebrado como una piña, justo lo que busca ese Rufete que aunque lo evitó físicamente, sí que estuvo ‘presente’ en toda la noche.

Esta victoria no evitará que el de Benejúzar y sus ayudantes sigan pululando en cada sesión de Paterna, pero al menos Djukic se sentirá más reforzado cuando las miradas de los nuevos ‘fichajes’ en cada entrenamiento escrutinen cada detalle de las sesiones. En Swansea no fueron cinco o seis como el pasado martes, fue todo un valencianismo que necesita muchas más victorias para creer a ciegas en el ‘efecto Rufete’. Lo de hoy fue un paso de bebé, pero el comienzo soñado para el tándem que tiene en sus manos el futuro deportivo del club.

Parejo, goleador hoy, se lo cree. Otros compañeros siguieron perdidos y serán carne de vídeo, esos que ahora ya se pueden desmenuzar pormenorizadamente tras cada partido y entrenamiento. Porque la clasificación como primeros de grupo no puede tapar todas las carencias que sigue arrastrando esta plantilla, casi se puede afirmar que haga los cambios que quiera el técnico serbio. Así que ya se puede esperar más de uno, que acabó tirándose de los pelos por la supuesta invasión masiva de técnicos de la Academia en el trabajo de la primera plantilla, mucha más actividad para tratar de tapar todas las grietas que sólo se puede lograr a base de mucho curro cada día. Ese que defiende a muerte el nuevo jefe del organigrama deportivo, ese que se quedó cumpliendo mientras su equipo buscaba la reacción en las islas británicas.

Porque espera la final de Osasuna, donde deberá seguir funcionando el talismán Rufete si se busca que el puesto del entrenador siga estando a salvo. En esto del fútbol está demostrado, casi empíricamente, que lo de ‘a entrenador nuevo, victoria segura’ suele acabar en la siguiente oportunidad, pero en Gales el Valencia CF acuñó un maravilloso a ‘manager nuevo, victoria segura’. Veremos lo que dura este nuevo invento…

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