Al Valencia cada día le gusta más el estilo ‘juvenil’

Las señales -y las carencias económicas del club- invitan a pensar que mucho antes de lo esperado el primer equipo del Valencia CF podría nutrirse de futbolistas de la Academia Gloval. El ascenso de Rufete a manager general deportivo es un primer paso, una figura que conoce al detalle cada rincón de la Ciudad Deportiva de Paterna y a todos los diamantes que se pulen allí día a día, pero el más importante es el rendimiento que tengan en sus equipos los principales protagonistas que son los jugadores.

Y si uno se olvida por un momento de las decepcionantes trayectorias que están sufriendo el primer equipo y el Valencia Mestalla, y mira hacia la categoría juvenil, se encuentra con una realidad más que agradable. Tanto el Juvenil A de Rubén Baraja como el B que entrena Rubén Mora son líderes en División de Honor y en Liga Nacional respectivamente, recuperando el prestigio que el club ‘ché’ había perdido los últimos años en estos campeonatos, y son responsables de cuidar la evolución de chavales a los que tanto miembros de la Academia, como técnicos de otras escuelas, auguran un futuro brillante.

Algunos ya han recibido llamadas de Djukic y Nico Estévez para acompañar a los dos primeros equipos del club. El último caso se produjo este pasado fin de semana, cuando el primer equipo se llevó a Tarragona para la Copa del Rey al portero Antonio Sivera mientras que el Mestalla, que se jugaba la vida en El Prat, contó con el debut goleador en su estreno del delantero Toni Martínez. Fueron sólo una muestra más de un talento juvenil que ya ha participado en entrenamientos y en concentraciones de pretemporada como la de Speyer, acudido a amistosos como los de Valladolid y Burjassot y que, tras romper la barrera de ser citado por primera vez esta campaña para un partido oficial, podría repetir el próximo jueves en el intrascendente encuentro de Europa League contra el Kuban Krasnodar.

Los porteros Antonio Sivera y Héctor Pizana, los defensas Kaiser, Tendillo, Álvaro Pérez, Fran López, Rulo y Lato, el centrocampista Álex López y los delanteros Toni Martínez y David Martínez ya saben lo que es formar parte esta temporada del segundo y el primer equipo, sólo una muestra de lo que pretende lograr Rufete de aquí en adelante. El de Benejúzar está removiendo el avispero de Paterna en busca del talento que debe ser la base del futuro Valencia CF, uno formado en su mayoría por gente de la casa que haya aprendido a competir desde muy joven. Una labor a la que está contribuyendo sobremanera Rubén Baraja, la revelación de los banquillos en la cantera y el hombre que está sacando el máximo provecho de toda la materia prima que le rodea. Un técnico con las ideas muy claras, que además es uno de los que trata de cambiar la tradicional estructura vertical del club.

El ‘Pipo’, en la medida de lo posible, no quiere que le toquen el equipo para nada, sólo cuando uno de sus futbolistas tenga verdaderas opciones de jugar. El partido de Copa del Rey del Valencia en Tarragona parecía propicio para que Djukic citase a algunos juveniles -al final sólo acudió Sivera– que ocupasen el puesto de los del filial, a los que el serbio respetó ante la delicada situación que atraviesan. Pero a diferencia de otros años, las dinámicas de los equipos se tienen muy en cuenta, y el derbi entre el equipo de División de Honor de Baraja y el Levante -que llegó a Paterna como líder- era demasiado importante como para alterar los biorritmos habituales del Juvenil A. Esta temporada ya no se llama a jugadores sólo para rellenar, el nuevo organigrama quiere que cuando un canterano ascienda esté preparado para aportar, y además los de arriba estén dispuestos a darle la oportunidad.

El resultado del partido contra los ‘granotas’, con victoria valencianista dos años después y ascenso al primer puesto, confirmó las grandes perspectivas del equipo. En el B, que no jugó, también celebraron el gol de Toni Martínez con el Mestalla, y ambos conjuntos juveniles se preparan por si la Europa League se presenta como una nueva oportunidad para que el aficionado siga descubriendo que, en las profundidades de la Ciudad Deportiva, se está gestando una magnífica generación de futbolistas.

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