El fracaso se confirma. Ni llegó en forma, ni ha aguantado sano. Tras viajar a Estados Unidos para tratarse con sus médicos de confianza, Lamar Odom ya conoce su dolencia: sufre una protrusión discal que le mantendrá fuera de las pistas entre seis y ocho semanas de baja, según avanzó el blog El Contraataque.
La pelota estaba en el tejado del Laboral Kutxa. El club baskonista tenía dos opciones. Bien aguantar a que el jugador se recupere y extender su contrato hasta final de temporada, bien prescindir de sus servicios vistos los inconvenientes deportivos que está dando. Finalmente, el Baskonia se decantó por la segunda opción, aunque en el comunicado emitido por el equipo vasco no se descarta un nuevo acuerdo cuando el americano supere su lesión.
El problema no era solo el tiempo de baja de Odom, sino el hecho de que cuando volviera a jugar tendría que repetir el proceso de adaptación y puesta en forma que no había ni siquiera completado en los pocos partidos que ha jugado con el club azulgrana. Dos meses por la lesión y varias semanas para encontrar el ritmo de competición.
El alero norteamericano se recuperará en su país, pero asegura que quiere regresar a Vitoria-Gasteiz. “Es algo que está más allá de mi control y del de cualquiera. Tengo que ser responsable y cuidar la lesión. Me lo quiero a tomar muy en serio y con orgullo. El viaje no ha terminado así que tengo que cuidar esta lesión y lo voy a hacer aquí pero sigo representando a Baskonia y lo que quiero es tratar de volver a la cancha y dar un buen espectáculo a la gente de Vitoria. Quiero hacerlo con integridad y orgullo. Quiero hacerlo sin perjudicar ni al club, ni al equipo ni a mí», explicó Odom.
Lo que haga el Laboral Kutxa en el futuro podría repercutir indirectamente al Valencia Basket, ya que a pesar de que quedan todavía 12 jornadas de liga regular ambos conjuntos podrían verse las caras en una hipotética eliminatoria de cuartos de final.