En el entrenamiento matinal del martes, cuatro futbolistas han estado ensayando desde el punto fatídico después de la sesión. Sérgio, Ivanschitz, Rubén y Barral han estado practicando penaltis bajo la atenta mirada del segundo entrenador, Luciano Martín. Los dos guardametas que han estado intentando detener los disparos han sido Javi Jiménez y el portero del filial Leandro Montagud.
De los muchos lanzamientos que han realizado los cuatro futbolistas tan solo ha fallado uno de sus penaltis un jugador. Lo casual es que ha sido el portugués Sérgio Pinto, el elegido por Caparrós para lanzar la pena máxima el día del partido frente al Valladolid. Además, el último penalti lanzado por el ex del Hannover 96 también estuvo a punto de detenerlo Javi Jimenez.
Tanto Rubén, como Ivanschitz y Barral anotaron todos sus lanzamientos. El tema de quien debe lanzar los penaltis es algo que preocupa al cuerpo técnico y más después de fallar los últimos dos penaltis consecutivos. Tras la marcha de Iborra, todavía no hay un futbolista asignado para esa tarea.
Los tres penaltis que ha lanzado el Levante en lo que llevamos de temporada los han tirado tres futbolistas distintos. Tan solo uno lo ha logrado marcar, Nabil El Zhar. Tanto Ivanschitz como Diop desaprovecharon sus oportunidades desde los once metros. Ahora toca esperar para ver cual es la decisión de Caparrós.
El técnico invita a comer a la plantilla
Tras el entrenamiento, Joaquín Caparrós ha invitado a toda la plantilla y a algunos miembros del club que trabajan al lado del equipo a una comida. Como ya hizo en su dia en el stage de pretemporada en Isla Canela, el entrenador andaluz ha citado a todos en el restaurante Pilsener a las 14:00 horas para disfrutar de un manjar en familia .