Fue, sin duda, la imagen de otro entrenamiento rutinario del Valencia, mientras espera la incorporación de las piezas que están disputando partidos con sus respectivas selecciones nacionales. Feghouli ya está de vuelta y pisó el césped tras quedarse ayer lunes en el gimnasio, lugar en el que hoy estuvo Bernat, y a Banega se le espera para el jueves debido a que tiene un partido en Uruguay y el regreso es más pesado que el de los portugueses.
Cedric le gusta mucho a Djukic. Le sorprendió gratamente en el amistoso del martes de la semana pasada en Burjassot y le terminó de convencer cuando vio jugar al filial el pasado sábado contra el Badalona. En ese partido el mediapunta de raza negra fue de los mejores de su equipo, ofreciéndose en todo momento, desbordando en el uno contra uno e incluso llegando a asistir a Robert Ibáñez en el segundo gol.
Esta tarde ha vivido el segundo entrenamiento consecutivo con el primer equipo, y tras finalizar el mismo se ha quedado realizando estiramientos durante unos minutos, tiempo que ha aprovechado el técnico serbio para aconsejarle sobre distintos aspectos de su juego. Una muestra del interés que esta joven perla de Paterna ha despertado en el jefe del primer equipo, y quién sabe si una promesa de lo que está por venir para un jugador que agrada a todos los responsables de la Academia, pero sobre el que todos coinciden en afirmar que todavía tiene muchas lagunas en su juego.
Las ausencias por lesión fueron Diego Alves y un Víctor Ruiz -su puesto lo ha cubierto el central del filial Carlos Delgado- que tras retirarse ayer por precaución, debería volver este miércoles para seguir preparando el partido del fin de semana contra la Real Sociedad. Sus molestias en el tobillo no revisten mayor gravedad y los doctores esperan que esté al cien por cien para el sábado, el mismo nivel que tendrá un Javi Fuego que ha dado el susto en la sesión tras un golpe en la rodilla derecha. Después de ser atendido por los fisios, que le aplicaron un poco del spray ‘milagroso’, volvió a trabajar con la máxima intensidad junto al resto de sus compañeros hasta el final de la sesión.