Dura vuelta del Levante a los entrenamientos tras el 7-0

La preocupación de la caseta del Levante tras la derrota en el Campo Nou es muy clara, y desean que la «pájara» de la goleada no se extienda a los demás partidos. Uno de los futbolistas con más jerarquía en el vestuario, Pedro López, recordaba su experiencia en el Valladolid. El de Torrente también recibió un 7-0 contra el Real Madrid, una goleada que hundió moralmente al equipo y de la que tardaron cerca de un mes en recuperarse. Por eso, las voces autorizadas del equipo han trasladado ese mensaje al vestuario: la ‘tocata’ en el Camp Nou no debe, bajo ningún concepto, afecter de cara al partido frente al Sevilla.

Por suerte, la plantilla del Levante cuenta con un aspecto a su favor: la veteranía. Hay muchos jugadores que ya han vivido situaciones parecidas a lo largo de su carrera. Es el caso de David Barral, que recordaba tras el entrenamiento que cuando jugaba en el Sporting de Gijón perdieron las cinco primeras jornadas de forma consecutiva. Pero ese equipo logró resurgir y encarrilar la temporada varias semanas después.

Caparrós fue duro en sala de prensa tras la derrota, pero es algo que comprende la plantilla. También los jugadores fueron duros con ellos mismos. El cuerpo técnico está fastidiado moralmente: han visto ya varias veces el video del partido y han comprobado la cantidad de errores que hizo su equipo. Tras el entrenamiento, el segundo entrenador, Luciano Martin y el entrenador de porteros Luis Llopis siguieron trabajando en el Ciutat de Valencia.

Joaquín Caparrós, justo después de la sesión, se subió a las oficinas del Levante donde coincidió con Manolo Salvador. El técnico de Utrera ha estado cerca de una hora en dichas oficinas hasta que se ha marcado a su domicilio, a eso de la una y veinte del mediodía.

 

Luis Cortés (@Lucocortes)

Ir arriba