El Valencia considera a Wilfried Zahibo un recambio ideal y muy barato de Oriol Romeu

La mañana del jueves en la Ciudad Deportiva de Paterna se vio sobresaltada por la presencia de una figura espigada, de 1,90 de altura y de origen africano cuyo nombre es Wilfried Zahibo. Mediocentro defensivo que llega como refuerzo para el Valencia Mestalla, pero con la promesa de que si cumple en el filial su futuro inmediato está bajo las órdenes de Juan Antonio Pizzi.

Eso es al menos lo que Rufete y sus ayudantes le han trasladado al entorno del joven futbolista francés de 20 años, cuyo padre nació en Costa de Marfil. Zahibo procede del Fuenlabrada de la Segunda División B, donde era la estrella indiscutible sólo unos meses después de fichar procedente del Ajaccio de la Primera División francesa, con el que rescindió contrato para cumplir su sueño de probar fortuna en España.

Aquí, sus agentes eligieron Fuenlabrada por estar cerca de la capital de España y ser un escaparate para que muchos ojeadores del fútbol español observasen de primera mano las evoluciones de un mediocentro defensivo que comparte generación, y amistad, con Pogba y Kondogbia, los dos centrocampistas que se han adueñado en los últimos tiempos de la ‘sala de máquinas’ de la selección de Francia.

Zahibo, cuyo ídolo futbolístico es el jugador del Manchester City Yaya Touré, ha estado en preselecciones de las categorías inferiores francesas,  y según aseguran fuentes del Valencia, equipos como el Atlético de Madrid y el Granada también andaban detrás de esta joya que a partir de ahora se pulirá en la Academia Gloval. Un perfil de jugador que no tiene el Mestalla de Nico Estévez, que ha sido uno de los que más fuerza ha hecho para fichar al ex del Fuenlabrada.

Ha firmado por lo que resta de campeonato y dos años más, siendo visto por los responsables de la parcela deportiva como un futbolista capaz de abarcar todo el centro del campo, con unas condiciones físicas envidiables y no exento de un buen toque de balón. Ahí están sus grandes actuaciones con un Fuenlabrada que ocupa los puestos altos de su grupo, aunque deberá vigilar el tema de las tarjetas, ya que era el jugador más amonestado del conjunto madrileño.

Pero lo que más deberá vigilar será su rendimiento sobre el terreno de juego, porque los ojos de toda la Academia Gloval y del cuerpo técnico de Pizzi estarán sobre él, pendientes de su labor para integrarlo cuanto antes en un primer equipo que, si todo sigue el curso previsto, puede sufrir la baja de un futbolista que juega en su misma posición como es Oriol Romeu.

El catalán, propiedad del Chelsea, sabe que será muy complicado abandonar Londres a no ser que el Valencia desprenda una gran cantidad de dinero, cada día más superior ante las buenas actuaciones que él está cuajando una vez recuperado de su grave lesión de rodilla.

Es aquí donde entra en juego Wilfried Zahibo, apareciendo por Valencia sin hacer mucho ruido pero con la misión de dar la razón a aquellos en el club que ven en él a un mediocentro completo, barato y para muchos años en el primer equipo ‘ché’.

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