La Scuderia Ferrari gozó de una suerte dispar en el primer día de entrenamientos libres del Gran Premio de Baréin, que además también era la primera vez que la Fórmula 1 rodaba en este trazado de noche. El día de Fernando Alonso transcurrió con bastante fluidez, acabando en tercera posición en ambos turnos por detrás del imparable dúo de Mercedes formado por Lewis Hamilton y Nico Rosberg. Sin embargo, al otro lado del garaje de Ferrari, Kimi Raikkonen pasaba un día algo más difícil, que acabó en una decimocuarta posición. Ya se ha comentado que el finlandés aún no se encuentra cómodo en el habitáculo de su F14 T, pero es que hoy, además, rompió el fondo plano de su monoplaza en los primeros 90 minutos de entrenamientos de la jornada, después de haber “aterrizado” violentamente contra el piano de la curva 4. A sus dificultades se añadió ese tiempo perdido que se tuvo que emplear en arreglarlo.
Ya sabemos lo que se puede esperar de las carreras nocturnas tras las experiencias de Singapur y de Abu Dabi, y la acción en pista de hoy siguió un patrón parecido. Los tiempos bajaron notablemente en los FP2 y no debido únicamente a que la pista estuviera más limpia, sino también a que había 12 grados menos de temperatura en la segunda sesión. Otra buena lección del día ha sido que el compuesto Blando de Pirelli dejaba unos tiempos por vuelta significativamente más rápidos que los Medios.