«Harlem Shake» de Fuego

Las pretemporadas y concentraciones, por definición, siempre viven un ‘bautismo de fuego’ en algún momento. En las de baloncesto, por ejemplo, la selección de Gasol, Navarro y compañía obliga a pagar suculentas cenas a los ‘novatos’ de cada turno. En el Valencia, en cambio, a los ‘pollos’ le tocó algo menos caro pero igual de vergonzoso

Los detalles quedan a la imaginación de cada uno, dado que al tratarse de un acto privado los detalles deben quedarse entre cuatro paredes. Pero sí que os daré varias pistas: el comedor del hotel, risas, jolgorio, un Jonas que recién estrenaba paternidad, cinco canteranos que no habían hecho nunca una concentración con el equipo y un fichaje, Javi Fuego, que es protagonista hoy en VLC NEWS. Sumadle la canción del ‘Harlem Shake’ -«¡con los terroristas!»- a todo trapo y las caras enrojecidas de vergüenza de algunos de los que recibirieron la ‘novatada’ y os podéis imaginar, más o menos, la escena. Hubo baile y cánticos, alguno se resistió inicialmente aunque acabó cediendo y… hasta aquí puedo leer.

Detalles como el ‘bautismo de Fuego’ de anoche durante la cena denotan que el ambiente en la concentración es magnífico entre los futbolistas. Según me cuentan, la estancia está siendo más relajada que la que tuvo lugar el año pasado, también con tierras alemanas. Será el clima teutón, la comida del hotel, la brisa procedente del Rhin o las salidas -y llegadas- de este verano, pero es innegable que la ‘piña’ en el vestuario crece día a día.

La jornada de ayer fue muy productiva para Míchel Herrero, capitán general en lo que a correr se respecta y protagonista de una buena actuación en el partido de la tarde. Los focos goleadores, sin embargo, fueron para Viera y Paquito Alcácer, que no afloja ni un sólo instante. El niño de Torrent tiene el gol en la sangre, y anotó dos goletes -el segundo de bellísima factura, vaselina incluida- en el entrenamiento vespertino. La pujanza de los chavales jóvenes -también Fede y Arqués hicieron buen papel en ambas sesiones de trabajo- sigue aumentando con el paso de los días.

Los recelos de algunos futbolistas en situación delicada debido a la incertidumbre respecto a su futuro, como Valdez y Piatti, va decreciendo. Ambos son dos de los más activos dentro de la plantilla, siempre bromeando y generando ese ‘pegamento’ que crea vestuarios a prueba de bombas. Algo que Djukic se encarga de alentar, sea con chascarrillos con el cuerpo médico o metiéndose una paliza de siete kilómetros de carrera a buen ritmo para demostrar a sus muchachos que, a sus 47 ‘tacos’, el de Sabac está para renovar y para lo que haga falta.

Por cierto, Speyer empieza a espabilar y a darse cuenta de que un grande de Europa se ejercita en su territorio. El jueves a primera hora había cuatro gatos en el entrenamiento; ayer viernes, en la sesión vespertina, podían contarse casi medio centenar de curiosos tranquilamente poblando los alrededores del campo de entrenamiento. Entre hoy y mañana domingo podemos tener cantidades de seguidores significativas viendo a los chavales entrenar. Y claro, eso aumenta las probabilidades de que aparezca algún tipo de Tuilla en la sesión, o un argelino en la calle preguntando por Feghouli -que aterriza hoy junto a Banega y al flamante fichaje Oriol Romeu-, o una familia alemana originaria de Alzira en el hotel del equipo. ¡De locos!

 

Paco Polit (@pacopolit)

VLC NEWS / Speyer (Alemania)

Ir arriba