El acuerdo está perfilado desde hace días, antes incluso de que el futbolista se marchase a tierras estadounidenses. A su regreso del ‘stage’ en Speyer, Salvo y Cissokho acordaron que el jugador debería salir rumbo a la Premier en busca de una mayor continuidad. De hecho, la intención era hacerlo pocos días después.
Sin embargo, las negociaciones con Sunderland y Liverpool se prolongaron más de lo deseado. El equipo de Anfield fue el más interesado y dejó todo acordado hace unos días: el futbolista recalará en Liverpool cedido hasta verano de 2014, con el conjunto inglés haciéndose cargo de la ficha del jugador y con la inclusión de una opción de compra por valor de 4 millones de euros, aunque el Valencia está peleando porque esta opción de compra sea de 5 millones de euros. De hecho, ya ha comunicado al club inglés que ese es el precio fijado por el futbolista galo.
Ahora mismo, Valencia y Liverpool continúan negociando por el el otro punto sin resolver: el dinero que el equipo inglés abonará al valenciano por la cesión. El Valencia pidió desde el primer momento un millón de euros, mientras que el Liverpool sólo está dispuesto a poner sobre la mesa la mitad de esa cantidad.
Pese a las discrepancias, los agentes del jugador son optimistas y piensan que ambos clubes pueden fijar una cifra intermedia que deje a todas las partes satisfechas. Especialmente al futbolista, cuyo entorno afirma que el equipo ‘red’ es «un club soñado» para el galo.