El técnico croata remarcó tras acabar el choque que sus jugadores hicieron una buena faena, sobre todo a la hora de contener a los franceses en la segunda parte. «Ellos consiguieron meter canastas muy difíciles, pero supimos reaccionar y volvimos al partido. El equipo estuvo muy entero y hemos ganado un partido importante. No ha sido fácil porque el campo era muy extraño y para nosotros demasiado pequeño. Además, pienso que nuestro lado del cuadro es mucho más duro que el otro, todos los equipos tiene experiencia en Euroliga y hay que ir paso a paso», subrayó.
«Hoy los bases han tenido un acierto tremendo, algo que nos beneficia mucho porque nos abre espacios para los pívots y para el resto de jugadores», puntualizó el entrenador del Valencia Basket. Oliver Lafayette contribuyó con 17 puntos y 8 asistencias, mientras que Van Rossom terminó con 14 puntos en su haber. Una gran redención después de su mal encuentro en el Palau, aunque el de Split aseguró que «el otro día tampoco hicieron un mal partido».
Sobre la lesión en el cuello de Vladimir Lucic, que no viajó con el resto del equipo, el preparador croata aseguró que espera «tenerlo de vuelta en dos o tres días» porque «aunque el jugador sigue con dolor no tiene nada grave». «Es verdad que parece que tengamos una maldición, pero Lucic el viernes vino con un dolor en el cuello que no podía ni moverse y eso es algo circunstancial que pasa en todos los equipos», concluyó.
El Valencia Basket hará noche en la capital francesa y regresará mañana al mediodía para centrarse en el choque del fin de semana ante el Gipuzkoa Basket.