Piatti y Feghouli decantan el derbi valenciano

Se avecinaba, pese al tiempo desapacible, una noche grande en lo futbolístico por sensaciones, por ganas de fútbol tras el parón liguero. Caparrós, pillo él, optó por cambiar las tornas en el campo a ocupar en el primer acto. Son pequeños detalles que no influyen en lo deportivo pero sí en lo anímico, en la rutina del equipo local. Sirvió para ver cómo se desarrollaba el gérmen del nuevo proyecto de Juan Antonio Pizzi. El arranque fue dominador por parte local, con el control de la posesión aunque sin llegadas claras, más allá de un remate flojo de Feghouli. El Levante pidió penalti en área de Alves en el primer minuto de juego, aunque los jugadores no perdieron demasiadas energías en reclamar.

El argelino pareció resucitar en un partido de hombres, de poder a poder durante su tramo inicial. La parcela ancha fue una batalla en cada balón dividido, con Oriol y Parejo midiendose a Simao Mate y Diop en un choque de trenes sin ganador claro en la mayoría de ocasiones. Pizzi buscó abrir las bandas con Bernat y Barragán, aunque Caparrós sacrificó sus costados para redoblar esfuerzos en las ayudas. Los centros, eso sí, llegaron con cuentagotas a un Postiga voluntarioso pero sin acierto.

Un zurdazo de Jonas volvió a avisar a Navas de que su noche no iba a ser tranquila. El Levante contestó con un par de acercamientos a balón parado, aunque Diego Alves demostró contundencia y seguridad en el juego aéreo. La línea de trescuartistas de Caparrós trataba de robar con una presión adelantada, pero apenas tuvo opciones de quitar la pelota a los mediocentros locales y montar los contragolpes.

El gol fue un jarro de agua fría para el Levante. Llegó en un momento decisivo, a escasos instantes del paso por vestuarios. Un centro de Bernat a los dominios de Navas acabó en un rechace al costado izquierdo del área pequeña. Allí apareció Pablo Piatti, más pequeño y más listo que nadie, para domarla con el pecho y romperla con un zurdazo inapelable a botepronto. Un gran gesto técnico y golazo que apuntarle al espíritu inconformista del argentino, primer as de la manga que se sacó Pizzi en la vertiente ofensiva en su debut.

El gol condicionó a ambas escuadras tras la reanudación. No tardó Caparrós en mover el banquillo para buscar algo más de mordiente en ataque, visto que no había tenido oportunidades claras en el primer acto. La salida de Xumetra y El Zhar dio más verticalidad al equipo, que pese a ello no se tradujo en ninguna ocasión de relevancia hasta que Barragán concedió un ‘regalo’ en defensa que Barral estuvo a punto de aprovechar. Alves, atento como toda la velada, abortó el empate.

Fueron minutos de calentura dentro del césped. Jonas pidió penalti tras un choque con Rubén dentro del área visitante; instantes después, Mathieu fue abajo con dureza para rebañar un balón ante la cabalgada de David Barral, ganándose la cartulina. Diop y Parejo tuvieron sus más y sus menos. Un remate del propio senegalés desde la frontal fue atrapado con facilidad por Alves, que intentó templar ánimos y parar el reloj para que los suyos recuperasen el aliento.

El partido se rompió con dos detalles de clase, de diferente estilo. El primero llegó de la mano de Barragán, que en un arranque de pundonor consiguió recuperar la posición y birlar una pelota en zona de tres cuartos que dejó descolocada a la zaga granota. El balón cayó en botas de Feghouli, que quebró a un El Adoua con cintura de madera para batir a Navas con una suave vaselina que golpeó en el larguero antes de entrar. Locura en Mestalla con el segundo gol local. La enajenación transitoria del estadio, bendita demencia, acabó con ovación a un Piatti desahuciado al principio de temporada por Djukic y que se marchó viendo como su nombre era coreado por los aficionados.

El 2-0 fue definitivo. Caparrós dio minutos al joven Camarasa en la medular, que mejoró las prestaciones de Simao Mate. Ambos equipos habían dejado todo lo que tenían en el césped, y la tregua fue la nota predominante hasta el final del duelo. Pizzi dio unos minutillos al final a Fede Cartabia: Postiga se marchó cabizbajo por no ver portería, pero el público reconoció su esfuerzo y esta vez no hubo pitos al ariete luso. El derbi, de forma inapelable, se quedó en casa.

 

Ficha técnica

Valencia CF. Alves; Barragan, R. Costa, Mathieu, Bernat, Parejo (78′ Banega), Oriol, Feghouli, Jonas, Piatti (73′ Guardado), Postiga (84′ Fede).

Levante UD. Keylor, Pedro López, El Adoua, Vyntra, Nikos, Simao (71′ Victor Camarasa), Diop, Pedro Ríos (53′ Xumetra), Rubén, Ivanschitz (53′ El Zhar) y Barral.

Goles

1-0 Piatti (min. 41); 2-0 Feghouli (min. 73)

Árbitro: Muníz Fernández (Colegio Asturiano). Mostró amarilla a Ricardo Costa (min. 39), Mathieu (min. 60), Simao Mate (min. 63)

Incidencias: partido disputado en el Estadio de Mestalla (35.000 espectadores).

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