El Valencia, a través de un comunicado oficial, ha actualizado el estado del litigio que mantiene con el futbolista francés Adil Rami, al cual le abrió un expediente disciplinario la semana pasada por sus declaraciones en la previa del partido contra el Granada.
Tras reunirse con los abogados del jugador, ambas partes han acordado, como así indica el escrito colgado en la página web oficial del club, que se le impondrá una semana de suspensión de empleo y sueldo que comenzará a contar desde este sábado 5 de octubre, de acuerdo con el Reglamento de Régimen Interno del Valencia.
En esta sanción se ha tenido en cuenta un atenuante como es el arrepentimiento que ha expresado Rami, que desde hoy mismo comenzará a buscar, en colaboración estrecha con la entidad valencianista, una salida satisfactoria para ambos en el mercado de enero.
A las mismas puertas de la sede del club valenciano comparecieron Luis Chabaneix y Carlo Alberto Brusa, letrados del central galo, para detallar lo acontecido en el cara a cara con la directiva ‘ché’. Lo primero que hicieron fue «agradecer» que les hubieran permitido reunirse, confesando que «Rami ha podido expresarse en esta reunión y mostrar un arrepentimiento por las palabras vertidas contra sus compañeros, entrenador y contra la directiva del club».
Afirmaron que el presidente Amadeo Salvo había acogido «muy bien» las palabras de arrepentimiento del jugador, que fueron «muy sentidas» de su parte, y que el encuentro había servido para acordar que «la mejor resolución del litigio era encontrar un acuerdo amistoso entre ambas partes».
Antes de despedirse, hablaron de las conclusiones finales a las que habían llegado ambas partes, que tenían que ver con que «el Valencia CF ha podido recuperar su prestigio con este arrepentimiento», añadiendo que «por fin se ha recobrado el espíritu deportivo que siempre debería imperar», finalizaron.