El capitán valencianista estuvo en el disparadero durante las últimas horas del mercado invernal, llegando a relacionarse su posible salida con el futuro de Vezo y la incorporación de Otamendi. Al final ninguno de los tres cambió de aires, aunque Ricardo Costa se mostró dispuesto a recalar en Turquía para satisfacer los deseos valencianistas.
El propio club le comunicó, antes de que se cerrara el plazo de fichajes, que la opción del Besiktas era buena para el Valencia y también para él, garantizándose los minutos que la entidad valencianista no podía asegurarle tras el refuerzo de Senderos y el debate por incorporar a Otamendi.
Es año de Mundial y Ricardo Costa sabe de la importancia de competir lo máximo posible. Su respuesta ante la propuesta que le hizo el club no fue de enfado, mostrándose abierto a explorar la aventura turca en beneficio de todas las partes.
A última hora el Valencia apostó por Vinícius Araújo como tercer extracomunitario -el máximo permitido- en detrimento de Otamendi y ni tan siquiera contempló sacar a Ricardo Costa rumbo a Turquía.