«Nos vamos con la cabeza alta. Ha sido una derrota muy dura. Ahora toca luchar por la medalla de bronce y que nadie dude de que lo vamos a hacer», dijo Rudy.
«El vestuario se va a levantar solo. Ésta ha sido nuestra octava semifinal europea consecutiva y creo que eso tiene un valor. Hoy nos ha tocado la cruz, pero el domingo tenemos que volver a salir a ganar a Croacia», finalizó Rudy Fernández.