El calor es sin duda la característica por excelencia de la estación veraniega. Calas, playas, ríos y montañas sirven de refugio para millones de españoles, y otros tantos turistas, que estos días visitan nuestro país. No hace falta salir de la Comunitat Valenciana para disfrutar del verano. Enclaves como Tabarca, El Saler, Les Fonts de l’Algar, Montanejos, Viver o los tranquilos pueblos del interior de la Comunitat, pueden servir de refugio donde pasar el verano sin gastar una gran cantidad de dinero e invirtiendo en el sector turístico, nuestro gran motor económico.
Cierto es que este verano está siendo un tanto atípico en cuanto a las temperaturas. No hace demasiado calor, y eso se agradece. No obstante, la temperatura social y política sigue alta, muy alta. El panorama internacional no se aclara ni a la de tres. Desgraciadas guerras en Oriente Próximo, que estos días se visualizan a través de un pequeño niño sirio vapuleado por los bombardeos en la ciudad siria de Alepo. Inciertas elecciones en los Estados Unidos, con un populista, Donald Trump, como candidato por el Partido Republicano. Y por si fuera poco, aquí en nuestro país, los partidos no se acaban de aclarar.
A excepción del acuerdo entre PP, Ciudadanos y Coalición Canaria, algo que en el caso de los dos primeros partidos estaba cantado, no hay nada más. Rivera ha cedido en algunas de sus máximas: eliminar diputaciones, el total de los aforados o los insolidarios sistemas fiscales de Navarra y Euskadi. Entre las exigencias de C’s al PP, na comisión de investigación sobre la supuesta financiación ilegal del PP, que habría salido adelante igual ya que el PSOE ya la ha solicitado, y sumando todos los votos de la izquierda, podría haber salido adelante.
El PSOE por su parte, sigue enrocado, como si eso fuera a salvarle de la quema a la que su partido lleva expuesto desde el ascenso de otras fuerzas de izquierda como Compromís, Podemos, En Marea o el resto de marcas locales.
El calor político es sofocante, y si no se remedia pronto, la temperatura seguirá subiendo aunque haya que ir a votar el día de Navidad.