Con la visita de Sánchez y Rajoy, Valencia vuelve a ser el foco de atención para los candidatos a la Presidencia del Gobierno en una campaña electoral que, realmente, empezó el 21 de diciembre. Un día después de las elecciones generales del 20D, algunos ya vaticinaban nuevos comicios ante la falta de voluntad de pactos. No iban desacertados y esta ya es la campaña más larga de la historia. Además, con consignas más que previsibles en sus mensajes a los ciudadanos
La dinámica de unos y otros ya nos la sabemos de memoria. Por una parte, el PP recurre a aquello de infundar miedo ante una coalición de izquierdas. Algo así como: “Cuidado que vienen los comunistas”. A sabiendas de que las encuestas le sigue colocando en primera posición, en cuanto a número de escaños.
Por otra parte, los otros, el PSPV-PSOE, Ciudadanos y Unidos Podemos, que volverán a abrir todos los cajones posibles para tratar de poner en marcha el ventilador de la corrupción y los recortes. Aunque Pablo Iglesias y Alberto Garzón incluirán como novedad la consigna del pacto por la responsabilidad social: crear un Gobierno de izquierdas sí o sí. Porque Albert Rivera estará en su línea, jugando al despiste, y Pedro Sánchez, quien arrastra un gran desgaste ante el frustrado pacto de Gobierno, volverá a tirar de la necesidad de un cambio que debe pasar por las manos de los socialistas (los abanderados de las grandes políticas sociales en la historia de la democracia del país). Al menos es de lo que presumen los socialistas, a los que les crecen los enanos. Su primer rival es el Partido Popular, pero quizás, tras el acercamiento a Ciudadanos y los ataques y provocaciones de Pablo Iglesias, su mayor preocupación sea ahora la coalición entre Izquierda Unida y la formación morada (Podemos).
Empieza la cuenta atrás y Valencia ha sido, también, la elegida por el PSOE, PP y Ciudadanos para dar el pistoletazo de salida. Rajoy y Pedro Sánchez estuvieron ayer en tierras valencianas, el domingo lo hará Albert Rivera. Si bien es cierto que no son actos ni mítines de cierre de campaña, poca expectación generaron. El hastío de los ciudadanos es más que evidente y cuán larga se nos va a hacer la campaña electoral.