Vicent Marzà

Vicent Marzà: el gol ¿voluntario? en propia portería de Ximo Puig

Vicent Marzà: el gol ¿voluntario? en propia portería de Ximo Puig. No se atrevió ni la vieja guardia que ahora sustenta a Puig en el poder, ni en público ni en privado. Nunca se oyeron de boca del conseller Ciprià Císcar o la ministra y alcaldable por Valencia Carmen Alborch, ni antes ni después de sus nombramientos, palabras tan claras y que ni ellos mismos se atreverían a respaldar.

Ponemos estos dos ejemplos porque para el valencianismo siempre han sido, junto a Joan Lerma, los máximos culpables del catalanismo en las aulas, la administración y, en conjunto, en todo el territorio valenciano.

Vicent Marzà, el recién estrenado conseller de Educación y Cultura, se atreve en una entrevista realizada por una radio catalana no sólo a afirmar que respecto a Cataluña «somos compañeros de nación y de comunidad cultural». La afirmación salta cuando el periodista pregunta sobre la celebración del 11 de septiembre «en las comarcas del sur del Sénia» -como si ese territorio al que eufemísticamente se refiere no llegara hasta Murcia– a lo que Marzà responde que «evidentemente lo festejamos porque es un logro de la izquierda independentista que ha dejado de lado aspectos folklóricos y es un día de lucha». Marzà sigue su discurso y, sin que nadie le pregunte, afirma hay dos formas de vivir ese día -¿el 11-S? las que lo pueden «vivir y ver aquellos que pensamos que los països catalans son una realidad más de lo que pinta ahora el Estado, no sólo políticamente sino culturalmente y tendría que serlo todavía más en un futuro. Yo lo veo con esperanza, aunque si Cataluña se independizara habría ataques foribundos hacia los catalanoparlantes, pero eso nos ayudará a explicar cómo el Estado español no es democrático y nos ha estado ahogando durante tiempo y cómo podemos salir de él de una forma totalmente democrática y participativa».

Entre sonrisas, Marzà afirma que el proceso que vive ahora Cataluña «es un proceso que ya viviremos nosotros». Preguntado por la posición política de Compromís y su papel ante la situación que Marzà expone que «el proceso se ha iniciado y que no será un Tribunal Constitucional ni las leyes españolas las que tengan que pararlo. El proceso es del Pueblo y tanto si es legal o no tiene que realizarse».

«Hemos dejado de lado el victimismo del pancatalanismo y, sí, tenemos que daros las gracias -refiriéndose a Cataluña- porque hemos pasado a la acción: llegar a las instituciones y retenernas y cambiar las cosas desde arriba». Con estas palabras concluye la entrevista en la que el portavoz de Compromís por Castelló pretende «ganar el país en los próximos 10-15 años».

Sin palabras. Juzguen ustedes mismos en este enlace las palabras de la persona que rige la educación de nuestros hijos, manda sobre nuestra cultura y que, sin tapujos, habla así de claro.

¿La vieja guardia del PSPV-PSOE se ha dejado querer -y de paso asentir lo que nunca se atrevieron con Joan Lerma en el poder- con la imposición de Vicent Marzà? ¿Puig se ha dejado meter un gol? ¿O va a ser que no sabe a quién ha dejado un rebaño tan importante como lo son las competencias que Marzà tiene? Señor Puig, se siente, sea cual sea su respuesta la culpa es suya, usted firmó su nombramiento. Ahora bien, cambiar el pensamiento de las personas es difícil, más fácil es apartarlos del cargo, porque aunque mucho lo juren, perjuren o prometan: la cabra siempre tira al monte.

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