«Estamos en un punto de inflexión que indica que la recesión se puede estar dejando atrás”. Son palabras del ministro de Economía, Luis de Guindos, después de confirmar el «punto de inflexión» que adelantó ayer su compañero de Gobierno, Cristóbal Montoro. El crecimiento de la economía en el segundo trimestre estará «más cercano al 0% que al -0,5%, seguro», afirmó Guindos.
“No quiero lanzar campanas al vuelo, pero es una realidad», ha dicho De Guindos en el seminario Competitividad y Marca España, organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.
El ministro de Economía también ha avanzado que las entidades financieras nacionalizadas han concedido más de 11.000 millones de euros en créditos en lo que va de año, contribuyendo así a la recuperación de la economía.
Entre esas entidades, además de Bankia que ha aportado más de 5.400 millones hasta mayo, según datos de la propia entidad, están CatalunyaBanc y Novagalicia, cuyo futuro sigue siendo incierto. De Guindos ha reconocido que ha habido interés por estas dos últimas entidades, pero la fórmula para vender la participación del Estado no está decidida y ha recordado que hay un plazo de hasta 5 años para salir del accionariado de estos grupos. El Gobierno estudiará todas las opciones, pero con el objetivo de maximizar el retorno de la inversión, ya que hay que devolver el crédito europeo de 40.000 millones.
Al margen de las nacionalizadas, el resto de las entidades financieras, tanto bancos como grupos de cajas, se comprometieron con el Gobierno a prestar a las pymes este año 10.000 millones de euros más que en 2012, conscientes de que estas empresas son un sector con u papel clave en la generación de empleo y riqueza.
Por otro lado, el ministro ha sido preguntado por las participaciones preferentes y por su supuesto papel en la comercialización de las mismas en sus anteriores responsabilidades en la banca privada. «No he comercializado en mi vida preferentes», ha respondido De Guindos, que en todo caso ha dejado claro que es un asunto que «va mucho más allá de lo personal».