El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha advertido de que si se mantiene el ritmo tan «acelerado» de los recortes, el destino final de España podría ser el mismo que el de Grecia y ha criticado al actual Gobierno y también al anterior socialista por haber «renunciado a ejercer la economía». Méndez ha realizado estas declaraciones durante un acto de Nueva Economía Forum.
En su opinión, la Comisión Europea ha «cambiado» aplazar la reducción del déficit por más reformas estructurales, es decir «más de lo mismo»: una vuelta de tuerca a la reforma laboral y acelerar la puesta en marcha de una nueva reforma de pensiones, lo que supondría «quebrar» lo que existe hasta este momento.
Además, «invadiría» competencias de carácter nacional y «reafirmaría que las cosas importantes hay que sustraerlas de las presiones del funcionamiento democrático».
Para Méndez, España no podrá reducir su déficit porque el problema no es un exceso de gasto público sino de la caída «brutal» de ingresos. Ha recordado que Grecia «se ha hundido» pese a los rescates y ha advertido de que en España la deuda ha pasado del 36 % en 2007 a casi el 100 % a la vez que no deja de producirse la salida de capital.
A su juicio, una nueva reforma laboral agravaría la situación, por lo que ha recomendado «taparse los oídos» ante los «cantos de sirena» que, ha advertido, no van a parar hasta que no desaparezca la «última brizna» de legislación laboral e imponer la contratación libre «sin marco jurídico».
Ante la recesión actual, Méndez ha reiterado las propuestas sindicales y, entre otras cuestiones, ha abogado por buscar alternativa a la financiación de las pymes «vía cajas de ahorro». También ha abogado por «reformular» las cargas tributarias y que se reduzcan en el caso de las pymes o autónomos mientras que las grandes empresas deberían hacer una mayor aportación.
Méndez ha calificado a la CE de «estatua sin cabeza» y ha criticado a los países que lideran la UE por «su interés» en asegurarse que se les devuelva «hasta el último céntimo» en las mejores condiciones.
Respecto a quienes dicen que el paro se soluciona con un contrato único o que se explica en parte por la economía sumergida, ha aportado datos que ponen de manifiesto «que esa ecuación no funciona».