En la década de los 90 uno de los negocios que experimentó un boom fue las tiendas de ‘Todo a 100 pesetas’. Veinte años más tarde el sector está de capa caída, luchando contra el escaso consumo de los ciudadanos e intentando sobrevivir ante la fuerte competencia de las grandes plataformas regentadas por personas asiáticas.
El mercado actual de las tiendas ‘chollo’ está dividida entre un pequeño grupo de locales de propiedad española, pequeñas tiendas dirigidas por chinos además de grandes superficies, también de origen asiático, que esán destruyendo las ventas del resto del sector.
Amueblar y abastecer una tienda de aproximadamente 200 metros cuadrados tiene un coste de alrededor de 120.000 euros, nos cuenta Vicente, propietario de una de las tiendas de La Piñata Española, ubicada en la localidad de Paterna, y que relata a VLC News los pasos necesarios para ‘montarte’ una tienda de ‘todo a 100’, a la vez que nos desgrana la realidad del sector.
Como en cualquier negocio, lo fundamental es conseguir financiación y un local a buen precio que esté separado de la competencia. Respecto a la compra de mercancias, el empresario nos cuenta que él acude a un polígono situado en Manises, donde hay gran variedad de almacenes con los productos que se venden en estas tiendas.
«En estos almacenes hay tanto empresas de españoles como de chinos y ambas tienen el mismo precio, no es verdad que los productos asiáticos nos cueste menos dinero, yo compro algunos a proveedores chinos y otros a españoles dependiendo del precio», afirma. De la misma aforma añade que el margen de beneficio por cada producto es escaso, «un producto que a mí me cuesta cerca de 45 céntimos no lo puedo vender a más de 60 porque o sino no lo compraría nadie».
Respecto al consumo, Vicente admite que a pesar de que los productos de este tipo de tiendas sean baratos los clientes sólo compran lo que realmente necesitan, «veo a padres que vienen a comprar a mi tienda que salen sin poder comprarle un juguete de 2 euros a su hijo». A pesar de la crisis, que ha congelado el consumo de los hogares, otro de los principales problemas del sector es la moda oriental de abrir macrotiendas de 2.000 metros cuadrados y que ha provocado que pequeñas tiendas de chinos y de españoles tengan que cerrar ante la imposibilidad de hacer frente a dicha competencia.
«A principios de este año, a una distancia de un par de calles, abrieron una tienda muy grande de ‘todo a 100’ y desde entonces las ventas de mi negocio han caído un 30% y otras de la zona han cerrado, nos está haciendo mucho daño», lamenta Vicente, quien añade que han tenido que bajarse los sueldos y pedir más dinero ya que la facturación de la tienda apenas cubre los gastos. «Estos negocios ya no son rentables, no creo que nadie abra un pequeño local de este tipo, es insoportable mantener», concluye. ¿Nos estaremos enfrentando al fin de las pequeñas tiendas de ‘chollos’ de barrio?