Cuando nos hablan de la distancia de seguridad, nos dicen que lo mejor es mantener una distancia con el coche que va por delante de nosotros tal que, en caso de que éste haga una frenada brusca, nos de tiempo a frenar con total seguridad, sin peligro de que le alcancemos. Esa es la teoría, pero, ¿cómo sabemos, en la práctica, qué distancia es la más segura para nosotros?
Existen muchas formas de saberlo, pero lo primero que tenemos que tener en cuenta es que nadie nos obliga a circular cerca de otro coche. Podemos reducir la velocidad para “hacer hueco”, de igual manera que podamos adelantar al coche que nos precede si consideramos que vamos más rápido. En cualquier caso, mantenerse pegado al coche de delante no solo entraña riesgo en caso de frenada brusca, sino que es molesto para el otro conductor. Es una conducta estresante y agresiva para los demás y no debemos convertirnos en conductores acosadores.
Mantener la distancia de seguridad tomando como referencia el tiempo
Cuando circulamos a 100 km/h estamos recorriendo algo más de 27 metros por segundo. Esto significa que para dejar 50 metros de distancia de seguridad (el mínimo razonable en autovía) deberíamos estar a dos segundos del coche que nos precede, si vamos a 100 km/h. Si circulamos a 120 km/h, deberíamos mantenernos a 1,5 segundos para asegurarnos de que dejamos 50 metros de distancia. Lógicamente, a mayor velocidad, más distancia deberíamos dejar, porque la distancia de frenado aumenta en relación cuadrática con la velocidad. Como nos contaban en Xataka Ciencia hace ya algún tiempo:
si a 50 kilómetros por hora necesitamos una distancia de 25 metros para frenar (esto depende de muchos factores, fundamentalmente de la masa de nuestro vehículo), a 100 por hora no necesitaremos 50 metros, sino 100 (cuatro veces más), y a 150 por hora necesitaríamos la friolera de 225 metros para detener el coche
Además, otro factor: para saber la distancia de seguridad perfecta debemos saber cuánto tiempo tardamos en reaccionar. El humano medio y sano tarda en reaccionar aproximadamente 0,75 segundos (en general se estima que entre 0,5 y 1 segundo). Esto quiere decir que recorreremos una distancia que depende de la velocidad a la que circulamos en la que es imposible hacer nada para evitar una colisión. A 100 km/h podemos recorrer fácilmente 20 metros sin tener posibilidades de cambiar la trayectoria, o siquiera de frenar (por mucho ABS que llevemos instalado).
Mantener la distancia de seguridad fijándonos en los chevrones
Los chevrones que podemos ver en la calzada en muchas autovías del país están pensados para mantener la distancia de seguridad apropiada, porque están a una distancia tal que, manteniendo dos (por lo general) entre nuestro coche y el que nos precede, estaremos controlando la distancia de seguridad para la velocidad usual en las autovías. Estas marcas viales sirven exactamente para mantener la referencia, y no tener que hacer “piruetas” para calcular los segundos de distancia entre nuestro coche y una referencia determinada.
Para dejar dos chevrones de distancia con el coche que nos precede, deberíamos poder ver en todo momento uno de estos símbolos justo delante de nuestro morro y, a la vez, otro más antes del coche que va por delante. Si no conseguimos ver dos al mismo tiempo, estamos demasiado cerca. Seguro que, viendo así la distancia de seguridad, te parece demasiada. O, al a inversa, te parece que hasta ahora estabas circulando demasiado pegado al coche de delante. Piensa que en caso de imprevisto, recorrerás al menos 20 metros “sin reaccionar” la próxima vez que te acerques mucho a otro vehículo. Vía http://subaria.com/