La DGT ponía en funcionamiento en 2013 el radar Pegasus, alojado en un helicóptero, que tiene como objetivo controlar la velocidad de los coches desde el aire. Pero ¿cómo multan?
| LO QUE DEBES SABER… |
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Los helicópteros de la DGT que van equipados con el radar “Pegasus”, que comenzaron a funcionar en 2013, miden la velocidad de los vehículos desde el aire con el objetivo de reducir los accidentes de tráfico por sobrepasar los límites de velocidadestablecidos en nuestras carreteras. Y es que, la velocidad excesiva sigue siendo una de las principales causas de accidentes de tráfico en nuestro país.
El mecanismo y el software de Pegasus han sido verificados y homologados por el Centro Español de Metrología, organismo dependiente del Ministerio de Industria, Energía y Turismo. Los Pegasus vigilan todas las carreteras de la geografía española, pero principalmente funcionan para controlar la velocidad de los coches que circulan por las vías convencionales que no tienen separación física entre los carriles de ambos sentidos, y en las que suele ser más difícil establecer controles para denunciar a aquellos conductores infractores que no respeten la velocidad fijada en la carretera por la que transitan. Además, las carreteras secundarias son las que más accidentes acumulan.
¿Y cómo funciona el Pegasus concretamente? El helicóptero debe mantener una visión directa con el vehículo que pretende controlar. Puede detectar con extremada precisión velocidades de hasta 360 km/h.
Este sistema nunca se había usado en otros países hasta ahora, y funciona desde una altura de vuelo del helicóptero de más de 300 metros (1.000 pies) y hasta una distancia en línea recta con el vehículo controlado de 1 kilómetro. El radar de helicóptero consta de dos cámaras. Una panorámica que facilita el seguimiento y captación de la velocidad y otra de detalle, dotada con un teleobjetivo, que permite leer la matrícula del vehículo infractor.
Ejemplo de imagen tomada por el radar Pegasus
Pegasus ha sido el resultado de más de 6 años de trabajo del fabricante español del producto, Wescam, junto a la DGT y la autoridad certificadora Centro Español de Metrología (CEM). El fabricante del producto es canadiense, pero la idea, el liderazgo del proyecto, el diseño del algoritmo de control y registro de la velocidad y la certificación final son netamente españolas. Vía motor.mapfre.es