Ford y Heinz se unen para crear coches sostenibles

Ford y H.J. Heinz Company investigan la utilización de fibra de tomate para desarrollar un material bioplástico más sostenible para vehículos. Los investigadores de Ford están probando la resistencia del material para su utilización potencial en abrazaderas para cables y compartimentos portaobjetos.

El éxito a la hora de desarrollar un compuesto más sostenible podría reducir el uso de productos petroquímicos en la fabricación de vehículos y el impacto de estos en el medio ambiente

Podría parecer que tomates y coches no tienen nada en común. Pero investigadores de Ford Motor Company y H.J. Heinz Company están estudiando la posibilidad de hacer una innovadora puesta en común.

Investigadores de Ford y Heinz están investigando la utilización de fibras de tomate en el desarrollo de materiales compuestos sostenibles para su uso en la fabricación de automóviles.

Concretamente, se trabaja en que las pieles deshidratadas de tomates puedan ser utilizadas para fabricar abrazaderas de cables en un vehículo Ford o compartimentos portaobjetos como los que los usuarios de vehículos Ford utilizan para guardar monedas y otros objetos de pequeño tamaño.
“Estamos estudiando si este derivado alimentario puede resultar útil para su uso en el proceso de fabricación de automóviles”, cuenta Ellen Lee, especialista técnica de Ford en investigación de plásticos. “Nuestro objetivo es desarrollar un material ligero y resistente que cumpla con los requisitos de nuestros vehículos y, al mismo tiempo, reduzca nuestro impacto medioambiental.

Hace casi dos años, Ford comenzó a colaborar con Heinz, Coca-Cola, Nike y Procter & Gamble para acelerar el desarrollo de un plástico con base cien por cien vegetal para un uso que iría desde el embalaje a los tejidos y con un menor impacto medioambiental que los materiales derivados del petróleo que se utilizan actualmente.

En Heinz, los investigadores buscaban modos innovadores de reciclar y reutilizar las pieles, los tallos y las semillas de los más de dos millones de toneladas de tomates que la marca utiliza cada año para fabricar su producto estrella: el ketchup Heinz. Los responsables de Heinz acudieron a Ford.
“Nos encanta que se haya reconocido nuestra tecnología”, afirma Vidhu Nagpal, director asociado de Investigación y Desarrollo de envasado de Heinz. “Aunque estamos en una fase muy temprana de investigación y sigue habiendo muchas incógnitas, estamos muy emocionados con la posibilidades que podría suponer para Heinz y Ford la creación de plásticos totalmente compuestos por vegetales”.

El compromiso de Ford para reducir, reutilizar y reciclar forma parte de la estrategia global de sostenibilidad de la compañía para atenuar su huella medioambiental mientras acelera el desarrollo de vehículos con tecnologías mundiales de eficiencia de combustible. Durante los últimos años, Ford ha incrementado su uso de materiales reciclados no metálicos y materiales de base orgánica. Con el uso de componentes del interior a partir de fibra de celulosa reforzada y aislantes eléctricos a partir de cáscaras de arroz presentados durante el año pasado, el catálogo de materiales de base biológica ya incluye ocho materiales. Otros ejemplos son materiales compuestos a partir de cocos, materiales a partir de algodón reciclado para
alfombrillas y tejidos de los asientos y espuma de soja para los cojines de los asientos y reposacabezas.

Ir arriba