Los comandos de voz se pueden distraer a los conductores, incluso después de que haya terminado de usarlos. Los conductores pueden mantenerse distraídos 27 segundos después de usar los comandos de voz en sus teléfonos o en los sistemas de infoentretenimiento de los vehículos, según la investigación llevada a cabo por la AAA Foundation for Traffic Safety.
En el estudio publicado hoy, los investigadores probaron los sistemas activados por voz en diez vehículos del año 2015 en 257 conductores y tres sistemas de teléfonos inteligentes en 65 conductores. Encontraron que incrementaba las distracciones mentales y puede tener efectos residuales de segundos después de que el conductor había dejado de hablar.
Los manos libres también tienen riesgo para los conductores. Así lo han manifestado durante años.
Cada sistema de manos libres se califica en una escala de la distracción mental de los conductores entre 1 y 5, donde 5 es el más peligroso. AAA dijo que categoría 1 de las distracciones de los conductores están al mismo nivel que escuchar la radio, mientras que la categoría 5 es igual a realizar una prueba desafiante mientras se conduce. Una calificación igual o superior a la categoría 2, es el equivalente a hablar por teléfono, hecho que se considera potencialmente peligroso por la AAA.
Los conductores eran más propensos a perder la pista de su entorno al usar los comandos de voz, incluso, aunque que mantenían sus ojos en la carretera y las manos en el volante. Los conductores entonces podían pasar entre 15 y 27 segundos después de dejar de utilizar el sistema tratando de evaluar factores, incluyendo su ubicación.
Los conductores pueden conducir la longitud de tres campos de fútbol mientras que va 25 mph durante una distracción de 27 segundos.
La AAA está trabajando con los fabricantes, la Administración y otros organismos para crear sistemas más seguros para los conductores. Mientras tanto, dijo, los conductores deben tener precaución al utilizar estos sistemas de comando de voz o evitar el uso de ellos por completo, incluso cuando se encuentren en posiciones aparentemente seguras, como parados en un semáforo.