La pregunta en boca de todos antes del inaugural Gran Premio Red Bull de la República Argentina en el recientemente modernizado circuito Termas de Rio Hondo es si alguien puede frenar al campeón del mundo Marc Márquez (Repsol Honda Team) tras su doble exhibición en lss dos primeras carreras de la temporada.
El nuevo escenario mundialista será un desafío para todos, pero Márquez demostró el año pasado en Austin que él es uno de los más rápido se adapta a nuevos trazados y condiciones diferentes. Y con el ritmo que ha mostrado hasta ahora, muchos lo ven como el claro favorito en el primer viaje de MotoGP™ a Sudamérica en varios años. Su capacidad de exprimir el neumático duro trasero de Bridgestone ha puesto sin duda el listón aún más alto para sus rivales, ya que los problemas con los neumáticos, tanto el delantero como el posterior han castigado en mayor o menor medida a los considerados pilotos de cabeza regulares.
El compañero de Márquez, Dani Pedrosa, no fue de los más perjudicados por este punto y pudo protagonizar una carrera brillante en Austin hace diez días, aunque con el compuesto trasero medio utilizado comúnmente. Jorge Lorenzo (Movistar Yamaha MotoGP) hará todo lo que esté en su mano para empezar a nivelar su calamitoso comienzo de temporada, la caída en la primera vuelta de Qatar y su salida en falso en Texas, que le condenó a un 10º puesto. Más allá de la puesta a punto de su montura, el mallorquín deberá recuperar la fortaleza mental que le ha ayudado a conseguir sus grandes éxitos de los últimos años .
Su compañero de equipo Valentino Rossi ha demostrado que todavía puede seguir el ritmo de los pilotos de cabeza, aunque en Texas no pudo salvar los problemas que le dio un neumático delantero que se degradó muy rápidamente. Si él y el nuevo jefe de equipo Silvano Galbusera pueden superar estos problemas, el italiano podría volver a ser un aspirante al podio.
Su antigua escudería, el Ducati Team, materializó una gran carrera en Austin, consiguiendo su primer podio en seco en más de un año con Andrea Dovizioso. Su compañero de equipo Cal Crutchlow lo tuvo más difícil. En carrera se dislocó el dedo meñique de su mano derecha en un accidente que le dejó sin puntos en Austin.
Las motos de las escuderías satélite han estado ofreciendo un gran espectáculo desde el inicio de la temporada. Andrea Iannone (Pramac Racing) en particular, será uno de los pilotos a seguir, especialmente después de haber rodado en posición de podio con su Ducati durante un tramo importante de la pasada carrera en EE.UU. antes de sufrir el mismo problema que Rossi con el neumático delantero. En ese grupo están los dos hombres del Monster Yamaha Tech3, Bradley Smith y Pol Espargaró, que sumaron buenos puntos en Texas tras su trepidante cabalgada carenado con carenado y su pulso con Stefan Bradl (LCR Honda MotoGP) que quizás provocó alguna cana más a sus jefes. Bradl, Crutchlow y Álvaro Bautista (GO&FUN Honda Gresini) participaron en el test celebrado en el circuito argentino el año pasado, y es probable que tengan alguna ventaja, al menos en los primeros entrenamientos libres.
Después de la prueba de neumáticos que realizó Bridgestone allí el año pasado con estos tres pilotos, el fabricante de neumáticos ha optado por llevar a este Gran Premio un compuesto trasero simétrico, y tanto el delantero como el trasero están fabricados con el compuesto más duro para hacer frente a un asfalto que también parece bastante a los neumáticos.