Volvo Cars cree que la industria automotriz mundial debe esforzarse por que la introducción de una infraestructura de recarga para coches eléctricos estandarizada, según el Dr. Peter Mertens, vicepresidente senior de la compañía de investigación y desarrollo.
Para apoyar este impulso hacia un estándar global para la carga del coche eléctrico, Volvo Cars ha decidido estar detrás de la Charging Interface Initiative (Iniciativa Interfaz de carga), un consorcio de grupos de interés que fue fundada para establecer su sistema de carga combinada (CCS) como el estándar para la carga de batería- vehículos motorizados.
Volvo Cars es uno de los principales fabricantes de vehículos híbridos plug-in y ofrecerá una variante híbrida plug-in en cada nuevo modelo, ya que sustituye la totalidad de su cartera de productos en los próximos años. Se introducirá un vehículo totalmente eléctrico en 2019, en base a su arquitectura modular vehículo SPA.
Con el fin de consolidar la creciente popularidad de los vehículos eléctricos y asegurarse de que los clientes asumen plenamente la tecnología, el Dr. Mertens argumenta que es necesaria una infraestructura de carga simple, estandarizada, rápida y global.
«Vemos que un cambio hacia coches totalmente eléctricos ya está en marcha, como la tecnología de la batería mejora, los costes disminuyen y la infraestructura de carga se pone en su lugar,» dijo el Dr. Mertens. «Pero mientras estamos listos desde un punto de vista tecnológico, la infraestructura de carga no es bastante todavía. Para realmente hacer que la ansiedad por la autonomía sea una cosa del pasado, un sistema de carga estandarizada a nivel mundial es muy necesaria «.
El sistema de carga combinada, que ofrecerá dos funciones regulares y de carga rápida, hace que la propiedad de automóviles eléctricos sea cada vez más práctica y cómoda – especialmente en los entornos urbanos, que son ideales para los vehículos eléctricos.
Combina monofásico con carga rápida trifásica, utilizando corriente un máximo de 43 kilovatios (kW), así como de corriente de carga alterna a un máximo de 200 kW y la posibilidad futura de hasta 350 kW – todo en un solo sistema.
La Iniciativa de Interfaz de carga se encuentra actualmente en el proceso de elaboración de los requisitos para la evolución de las normas relacionadas con la carga y la certificación para su uso por los fabricantes de automóviles en todo el mundo.
«Estamos muy contentos de apoyar y participar en el establecimiento de normas para los sistemas de recarga de vehículos eléctricos. La falta de una norma de este tipo es uno de los principales obstáculos para el crecimiento de la cuota del mercado de los vehículos eléctricos ‘ «, dijo el doctor Mertens.
Volvo Cars, que tiene una rica herencia de la investigación y el desarrollo en los vehículos eléctricos se remonta a más de 40 años, es uno de los fabricantes de automóviles líderes en el campo de los híbridos enchufables con su tecnología Bimotor. Ya en la actualidad, uno de cada cinco de todos los XC90 de Volvo vendidos es un plug-in híbrido con un Bimotor T8.
«Nuestra tecnología bimotor ofrece el bajo nivel de emisiones, el silencio, la comodidad y el rendimiento de un coche eléctrico puro, combinado con la gama de un sistema de propulsión convencional. Ofrece los beneficios de la electrificación ya hoy en día «, agregó el Dr. Mertens.