Jamás soñó Canal 9 con ser una herramienta política tan eficaz como lo es ahora. Sirve para hablar de ética periodística, presupuestos, señas de identidad, deportes y hasta para una crónica de sociedad entre sus trabajadores. Incluso han aparecido un par de líderes que en las próximas semanas serán tentados para pasar a la política partidaria.
Jamás soñó Canal 9 en ser objeto de un debate parlamentario en las Cortes Españolas como ocurrió el martes. Ni siquiera TV3 con toda su parafernalia soberanístas ni Canal Sur, considerada históricamente como la televisión autonómica más manipulada de la historia, han ocupado semejante categoría. El martes todos los partidos de la oposición se declararon seguidores de una TVV que no habían visto jamás.
A Canal 9 todo el mundo la ha querido asesinar en los últimos años, desde Ximo Puig a Toni Cantó, que le envió un misil destructor. Pero ahora que se ha suicidado todo el mundo la quiere resucitar. ¡Pero si nadie la ha querido salvar desde los tiempos de Amadeu Fabregat incluido! ¡Si nadie ha querido sanear sus tripas!! ¡Ni los de dentro ni los de fuera!
¿Por qué entonces hay ahora hay mil salvadores? Pues porque hay tajada política a sacar. Hablar de Canal 9 es un titular hasta en el boletín de Almendralejo de Abajo. Y, por supuesto, es una arma de destrucción masiva contra el PP, responsable de esta movida por lo mal que ha gestionado un cierre inevitable.
El martes daba sonrojo escuchar en las Cortes a los responsables de los partidos de la oposición hablar de la resurreccion de Canal 9. Ni uno de ellos propuso cómo debería ser una televisión pública para ser viable. Nadie planteó costes reales, modelos de programación adaptados de la realidad televisiva actual, idoneidad profesional de los trabajadores en un marco muy competitivo, inversion técnica para asumir la multipantalla, el botón rojo, etc, etc. Sólo hablaban de lo malo que es el PP por cerrar la television pública valenciana y dejar en la calle a 1.800 trabajadores. ¿Cuántos se han quedado fuera con lo de Bankia, la CAM o la absorción de las rurales por Caja Mar? Muchos más y nadie ha protestado. Cinismo y oportunismo politico. ¿Por qué no presentan una alternativa viable? ¡Porque no interesa!!
Canal 9 se ha convertido en un arma de destrucción masiva que será utilizada hasta las elecciones. Da lo mismo que la empresa fuera inviable, como demuestra cualquier dato objetivo que se quiera valorar. Es una bomba para arrojar todos los días a la cara del PP, que tiene que purgar la mala gestión de una crisis televisada en directo.