Esta campaña electoral va a ser corta. Muy corta. Los estrategas de los partidos políticos han decidido que cuanto menos expuestos estén los candidatos a las inclemencias del aire libre, mejor para ellos. No los quieren dejar sueltos por si se queman. Y es que, como dice Pau Canaleta, uno de los mejores consultores electorales de España, la incógnita electoral se va a resolver a base de personas y no de partidos y sus propuestas. El PSOE ya ha hecho su estreno con Angel Gabilondo. Más importante la persona que el partido.
Esta campaña corta va a tener dos soportes: televisión y las redes sociales. Los mítines o las ruedas de prensa solo van a ser una excusa para enseñar la imagen y pasear fotos y videos por youtube y las televisiones. En el caso de la Comunidad Valenciana, sin TV propia, ya pueden espabilarse los candidatos con aprender a manejar las herramientas de internet, que los periódicos de papel van a servir para poco menos que verse en el recull por la mañana. Las elecciones las van a ganar o perder las personas.
Y si las personas no están preparadas para ello su partido morderá el polvo, porque la desconfianza de la gente solo se recupera o consigue mirándola a los ojos. ¿Van a jugar este juego, Alberto Fabra, Ximo Puig, Montiel, Toni Cantó y Oltra? SI el líder recupera o cosecha la confianza del electorado la gente no tendrá perjuicios para votar a otros de otro color. El líder garantiza el partido.
¿Y cómo debe ser ese líder? Canaleta y otros expertos lo definen en vísperas electorales como un elegido carismático, con empatía y mucha fuerza y ganas de ganar. No hay momento para la debilidad. ¿Es Alberto Fabra un triunfador o un derrotado por si mismo y por las circunstancias? ¿Se esconde Ximo Puig detrás de las siglas porque no se atreve a asumir las tareas de un líder? ¿Es Mónica Oltra algo más que una ruidosa aspirante?.
El elegido debe atender a estos siete principios:
–Tener autoridad. No solo poder. Autoridad moral.
–Tener trayectoria en lo que sea: política, empresa, ONG. Algo que demuestre su carisma y buen hacer.
–Dinámico. Trabajador.
–Preparado. Saber de qué habla, de lo qué habla la gente y aportar soluciones.
–Honrado. No solo serlo, sino parecerlo.
–Proximidad, cercanía a la gente. No desde un púlpito.
–Triunfador, con ganas de ganar.
Ahora pongan ustedes los nombres y valoren si cada uno de los candidatos a la Generalitat, a la alcaldía de Valencia o a su pueblo cumple con estos perfiles. Y cuál de ellos cumple mejor que el otro.
Y por supuesto la imagen. Yanis Varoufakis representa a la izquierda radical griega, va vestido a la última, pero no lleva corbata, va con la camisa por fuera y hasta pierde la maleta en un vuelo. Triunfador, próximo, preparado, trabajador, experto en lo que habla y exhuma autoridad con solo aparecer en una reunión ante la temible Troika. ¿Quién de nuestros candidatos tiene un perfil parecido a Varoufakis? Una con el caloret, el otro va de guapo y todos quieren llevar la insufrible colecta.
Y deben ser diferentes, no uno más. La coleta es a Pablo Iglesias lo que Felipe González a la pana en 1980. Puro postureo. Pero un elemento diferenciador e identificador dirigido al público que busca ¿Puede Pedro Sánchez acabar con Pablo Iglesias solo con considerarse el más guapo de la cuadrilla? El elegido del PSOE no tiene con qué diferenciarse, como demuestra la encuesta del CIS sobre el Debate sobre el Estado de la Nación. Si lo tiene Angel Gabilondo, que simplemente sigue la senda que marcó Enrique Tierno Galván que presentarse como un intelectual capaz de gobernar por encima de los aspavientos de los partidos políticos. ¿Hay algún candidato así en la Comunidad Valenciana? Imposible. Demasiado caloret en todos lados. Mucha superficialidad. Por eso las alianzas empiezan a vislumbrarse en función de las personas y no de los programas.
Levedad y falta de estrategia. El PPCV está demasiado a la defensiva para valorar el papel de un candidato y sacarle el jugo con los citados siete puntos. Por eso (y lo mismo pasará en el PSPV/PSOE) la campaña electoral para las autonómicas y municipales será corta y más de partido que de personas. ¿O ustedes ven a Fabra y a Puig con un discurso propio por encima del argumentario del PP y del PSOE?.
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