La liturgia de las primarias socialistas crea una agenda pública en la que parece que estamos implicados todos los españoles, cuando al final es una simple querella entre partidarios de uno u otro aspirante a gobernar el PSOE. Algo por otra parte normal en el seno de un partido que siempre ha estado dividido en facciones (Largo Caballero/Prieto/Besteiro, LLopis/González, de Alfonso Guerra y de Felipe, Bono/Zapatero….)
De entrada eso de las primarias es un buen instrumento para aclarar quién manda nominalmente y, sobre todo, es un agit prop que moviliza las bases de un partido en un momento de debacle total. Todo dios mira las primarias y sus cuitas y nadie recuerda que el PSOE agoniza electoral y orgánicamente. Las primarias son un distraído juego cortesano.
Porque las primarias, las gane Madina, Pedro Sánchez o Tapias, no van a solucionar el grave drama que tiene el PSOE, que es la desubicación histórica del socialismo e incluso de la socialdemocracia. El PSOE y el socialismo español e incluso el europeo se han quedado sin argumentos ante la dialéctica histórica. Y ahí está el ejemplo del socialismo italiano, el francés y ahora el español, por citar algunos casos.
El PSOE no tiene respuestas para la sociedad española. Ni los tiene ni los busca. Durante los últimos años han estado tan cómodos negando la crisis (Zapatero) o jugando a la contra (contra el PP en la Comunidad Valenciana) que se han olvidado que gobernar es aportar soluciones reales, no titulares de prensa.
El repaso de todas las declaraciones de sus líderes en los últimos años (es un mal de toda la izquierda española incluidos Podemos) es solo una suma de propuestas de gasto. Más subvenciones, más intervencionismo en el mercado, más control de las actividades privadas, más sector público, más administración…Y en ningún caso un apartado para los ingresos. ¿De dónde sale tanto gasto como proclaman las soflamas populistas de Izquierda Unida, Podemos o el propio PSOE?
No son propuestas de gobierno. Son proclamas electorales. Aún estoy por escuchar al PSPV/PSOE de Ximo Puig (Pedro Sánchez) una línea estratégica en orden a asumir la situación real de la agricultura valenciana, el cambio del sistema productivo valenciano para adecuarlo a la globalización o la reforma del capital humano. Pero tampoco hay aportaciones de Francesc Romeu (Eduardo Madina) en este orden. ¿Qué hace la intelectualidad socialista valenciana (Vicent Soler, Joan Romero, los Pérez, Boira…) que no alumbra a estos desnortados? ¿O es que no se dejan?
Han escogido el caudaloso manantial de las imputaciones en el PPCV de Alberto Fabra y de ahí no salen. ¿Eso es todo lo que tienen qué decir los socialistas valencianos sobre el futuro de la Comunidad Valenciana? Y claro, como populistas de la izquierda son mejores Mónica Oltra, Morera, Nomdedeu, Marga Sanz y la franquicia de Podemos, el PSOE parece una mera fotocopia. ¿Eso es todo lo que puede ofrecer un partido que aspira a gobernar?
Las primarias socialistas marcan la agenda política. Pero pasarán en dos semanas y luego volveremos a estar cómo antes. Con una sociedad que espera que alguien le diga qué queremos y qué podemos ser de mayores y unos partidos políticos que hablan un lenguaje de del Siglo XX. Gane Madina o Sánchez primero se encontrará con medio partido enfrente (como siempre ha ocurrido) y luego se correrán tanto a la izquierda que acabarán peleándose con Pablo Iglesias, lo cual demuestra la contradicción de la izquierda española. Y encima quieren cargarse a Felipe González.