Forcadell Dixit “Señoría, estos son mis principios; si me a mandar al talego, tengo otros” Esto es, más o menos, lo que ha venido a decir la Sra. Forcadell y el resto de miembros de la mesa del Parlament. Todo un alarde de épica y valentía nacionalista. Pero bueno, más allá del chascarrillo, pienso que, en realidad, es lo más sensato e inteligente que han podido hacer; ya se sabe que la épica y la inteligencia no se llevan bien y este caso no iba a ser distinto. No sólo es lo mejor para ellos, es lo mejor para todos; para la sociedad en general y la sociedad catalana en particular. A la ciudadanía se le haría difícilmente digerible que después de “los Jordis” y después de medio Govern, los tribunales pusieran a remojo toda la mesa del Parlament en plena campaña electoral.
La decisión del Tribunal Supremo ha sido la correcta y aunque parezca mentira, en realidad le ha salvado la cara a la Audiencia Nacional, porque lo que los autos dicen es, grosso modo, que puesto que los declarantes han acatado la legalidad y han renunciado a la declaración unilateral de independencia, no concurre un riesgo real de reiteración delictiva, si bien ante el posible riesgo de fuga, impone una abultada fianza de 150.000€ en el caso de Doña Carme. Con esto, marca una diferencia sustancial con el comportamiento de los miembros del Consell que se mostraron altivos e insumisos en sus declaraciones, lo que llevó a la Juez Lamela a dictar su ingreso en prisión ante un evidente riesgo de reiteración delictiva, además del concurrente riesgo de fuga.
Por lo tanto, si los miembros del Govern corrigen su estrategia y adoptan la misma que Forcadell y compañía, me atrevería a decir que pasarán la Navidad en sus casas.
La cuestión que me aborda ahora no hace referencia al qué, sino al cómo y al cuándo; al cómo y cuándo van a hacer ellos lo mismo y se acogerán a la Doctrina Marx como un náufrago a un madero. En mi humilde opinión, no tardarán en hacerlo y en tal caso, tienen varias opciones.
En primer lugar, el artículo 400 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal permite a un investigado (antes imputado) declarar cuantas veces quiera. Por lo tanto, sólo tienen que pedirle a la juez Lamela que les reciba de nuevo en declaración y ésta lo acordará de buena gana y en un plazo seguramente breve.
En segundo lugar, pueden esperar a que el Tribunal Supremo reclame las diligencias que se instruyen en la Audiencia Nacional y hacer allí la petición del artículo 400. Pero esto tiene un problema, y es que la acumulación, aunque creo que se producirá, puede retrasarse en el tiempo, cosa que a ellos no les interesa, ya que querrán salir lo antes posible para poder hacer campaña electoral.
En tercer lugar, si están en plazo de recurrir en apelación el auto de prisión, cosa que desconozco, podrían aportar a dicho recurso un escrito de puño y letra de cada uno de los investigados declarando firmemente y sin ambigüedades que acatan la legalidad constitucional y que se abstendrán de realizar o insistir en la tan manida DUI.
Si lo hacen bien y con seriedad, estoy convencido de que el Ministerio Fiscal modificaría su criterio y aceptaría una libertad previa prestación de fianza; fianza más abultada que la de Forcadell, dicho sea de paso.
Cuestión distinta es cómo van a explicar a sus votantes que se han desdicho de todo lo que les habían prometido sólo para evitar la prisión. Apuesto a que se defenderán diciendo que lo que ellos han hecho no es un “Groucho Marx” sino un “Galileo Galilei”. En fin, para gustos, genios.