Así tal cual la frase nos lleva a varios contextos. Ni siquiera los que me conocen y saben de mi condición /preocupación/ ocupación o vicio – como quieran llamarlo- podrán sin leer más saber a qué me estoy refiriendo, porque esta semana se han cumplido varios objetivos.
Es la semana de sumar, de pactar, de proponer, de planificar….. en política sí, pero yo quería hablar de fútbol. Perdonen el juego pero como todo el mundo habla de política pues mejor salir del papanatismo y abrir otro foco de debate.
De fútbol y de objetivos cumplidos.
Tres de los cuatro equipos valencianos han cumplido con las previsiones y anhelos marcados en el inicio de la temporada, excepto el Villareal CF, que queda fuera de cualquier competición europea. Todos hubieran podido quedar mejor, sí, pero Levante UD y Elche CF mantienen la categoría y el Valencia CF aún pasado por fase previa jugará la Champions League la próxima temporada, por lo que justo es felicitar por los éxitos conseguidos a las
Entidades pero sobre todo a los seguidores, que son al final los que de verdad sienten los colores.
Y esos son los objetivos cumplidos que quiero destacar. Miren las Entidades son importantes, incluso algunas presumen de ser “familias”, pero esos conceptos a mi me suenan más a mafia calabresa en conjunción de intereses
que a unión de sentimientos. A mi me interesan los colectivos formados por individuos, que sienten y padecen, y los seguidores de los clubs de fútbol somos eso en la mayoría de los casos: sufridores. Este año la campaña ha sido bastante irregular para todos por lo que cada jornada era un mundo. La Liga terminó y unos y otros presentan balances positivos: han cumplido el objetivo marcado inicialmente. Felicitemonos por ello y al que le parezca que en cualquiera de los casos mencionados el resultado es un fracaso que recuerde que todo depende siempre de la meta que te propongas alcanzar.
Tengo la sensación de que la liga acabó hace meses. Otras noticias han solapado la información futbolística y me da un poco de pena pero quiero pensar que si la actualidad política -la buena, la de proyecto, la de las
personas- ha disipado por unos días las absurdas portadas sobre peinados, tatuajes, guerra de fichajes, etc… quizá es que los otros objetivos cumplidos han supuesto un cambio más amplio del que pensamos: ¿será el nuevo opio del pueblo?.
Ojalá los personalismos no nos hagan añorar la fabricación de noticias futbolísticas.
Mercedes Caballero