¿Son 11 contra 11?

Esa es la pregunta que uno se hace cuando está a punto de comenzar la liga. La teoría ya la sabemos; sabemos todos los tópicos y todas la muletillas para justificar derrotas (los triunfos se justifican solos) y sabemos que “así es el futbol” y que “lo hemos dado todo”. Incluso sabemos que, en la práctica, echando la cuenta de la vieja, cuando el árbitro pita para que empiece el partido, sobre el campo hay 11 contra 11 y todo, claro, es posible. El problema, la perversión a la que ha llegado el futbol es que el número de los jugadores sobre el terreno es ya lo de menos y no debería darse la alineación de los 22 sino su valor en el mercado:  “A punto de comenzar el encuentro entre  un  presupuestos  de 470 millones de euros contra otro de 22 millones”  y no pongo ni el más grande, el Real Madrid con 517 millones, ni el más chico, el pobre Rayo Vallecano que con siete millones y medio comienza  este fin de semana una batalla más desigual que la del buen don Quijote.  Según las cuentas oficiales –de las que no se fía casi nadie- todos los equipos de primera salvo el Real Madrid y el FC Barcelona, suman entre los 17, unos presupuestos de 778 millones de euros, mientras que los dos equipos punteros, ellos solitos, disponen de 987 millones. Vistas sólo estas cuentas, a los del Rayo, les tendría que salir del corazón aquella frase de críos: “¡Jo, yo así no juego!”  

Pero no se trata sólo de eso –que ya es bastante- porque el dinero da poder y el poder termina por ser tóxico. Están también los despachos, las influencias,  la extraña relación de los clubs y los bancos, de los clubs y Hacienda, de los clubs y la tele con sus derechos, de los clubs y propia Liga de Futbol. No todos somos iguales ni en la vida ni en el fútbol y esas desigualdades se pagan y se compran.

Así están las cosas y el Valencia, con sus oficiales 103 millones de presupuesto, no está nada mal colocado con sólo los dos grandes y el atlético de Madrid por encima. De lo que pase en la temporada, tiempo habrá para hablar, pero por presupuesto al menos, habría que estar en Europa de todas, todas aunque ya se sabe que si luego pintan bastos… “el futbol el así”

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