La noche que el espíritu de Desayuno con Viandantes estaba preparando para el próximo 17 de marzo ya empieza a perder la carga de misterio. La organización, pese a haber desaparecido como la conocíamos hasta el pasado mes de diciembre, ha decido retomar su actividad en la ciudad puntualmente y no ha encontrado mejor momento que en plenas Fallas y promete hacer ruido…
A las 22.30 horas, «os convocamos a todos junto a la falla de plaza de Jesús para iniciar un sucedáneo de albà en la que nos acercaremos a la vertiente más experimental de la fiesta y de paso homenajearemos a algunos viandantes».
Se trata de hacer una ruta por algunas calles del distrito y rondar a los ciudadanos que han querido formar parte de la iniciativa, movilizada a través de las redes hace unas semanas, tal y como VLC News avanzó. La comitiva reunida cantará a los balcones, terceras alturas según el planteamiento inicial, que se hayan seleccionado en una ruta que por el momento sólo conoce la organización.
Participar del grupo a pie de calle es gratuito y está abierto a cualquier persona que llegue a conocer la propuesta, como siempre ha venido ocurriendo con Desayuno con Viandantes (redes sociales, boca a boca, blogs, medios…). Pero en esta ocasión no tiene nada que ver con esos desayunos, casi almuerzo y vermú.
De hecho, la organización lo deja claro en la convocatoria: «tened en cuenta que esto no es un desayuno a plena luz del día, el alcohol está socialmente admitido, así que no insistáis demasiado en la habitual bollería casera y pensad que no va a haber mesas con mantelitos y, por otro lado, a lo mejor os apetece un trago».
Llegamos a otro de los momentos transgresores del movimiento, de la recuperación del espacio urbano a la implicación del folklore para rondar a los vecinos en medio de la gran fiesta de la ciudad, las Fallas. No obstante, para hacer extensible a cuantos lo deseen este hito ciudadano, de corazón y pulmón, «como no podemos rondar los balcones de todos vosotros, os invitamos a que traigáis la música que os hubiera gustado escuchar a la puerta de casa, formato CD», apunta la organización.
«Pensad que es vuestra oportunidad de redimir a los tunos y reencontrarse con el folklore local, quizá descubrir al heredero de Chimo Bayo», afirman con el tono socarrón característico del DcV. Y, cómo no, la espontaneidad sigue siendo seña de identidad y esencia del colectivo y sus propuestas. Así que «si alguno quiere traerse algún instrumento o se anima a cantar en directo tampoco se lo vamos a impedir», sugieren.
Tened en cuenta un detalle: esto no es un desayuno a plena luz del día, el alcohol está socialmente admitido, así que no insistáis demasiado en la habitual bollería casera y pensad que no va a haber mesas con mantelitos y, por otro lado, a lo mejor os apetece un trago.