La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha asegurado este miércoles que el Ayuntamiento trabaja para que la Albufera reciba agua de calidad, en su mayoría de río. Así, ha indicado que parece que la cantidad de agua que va a llegar «es positiva», pero ha destacado la necesidad de conocer su origen para que no se perjudique al lago.
Barberá ha realizado estas declaraciones tras participar en la inauguración de la jornada ‘Agua, Energía y Cambio Climático: El reto de la eficiencia y la sostenibilidad’, organizadas por el Grupo Agua de Valencia, preguntada por la labor que desarrollará el consistorio tras aprobar por unanimidad una declaración institucional en favor de la Albufera.
El Ayuntamiento de Valencia aprobó en el pleno ordinario del mes de marzo, celebrado el pasado viernes, una declaración que recoge su posición sobre ‘Determinaciones contenidas en el proyecto del Plan Hidrológico de la demarcación hidrográfica del Júcar que afectan al espacio natural protegido de L’Albufera de Valencia’.
Por medio de este documento, la corporación municipal expresó públicamente la consideración de que «la mejora de las condiciones ecológicas de la Albufera sólo se puede conseguir habilitando caudales de uso exclusivamente ambiental para el lago y su entorno húmedo, de calidad similar a los de salida desde el embalse de Tous y en los volúmenes señalados en las alegaciones presentadas por el Ayuntamiento a dicho plan, así como continuando con la mejora del sistema de saneamiento de su ámbito territorial».
Asimismo, el consistorio resaltó su voluntad y la de la ciudadanía de «preservar para las generaciones futuras este singular patrimonio natural en las mejores condiciones posibles», al tiempo que se recordó que «la dependencia hidrológica de la Albufera del Júcar se inicia a finales del siglo XV».
Rita Barberá ha aseverado este miércoles que el Ayuntamiento va a «seguir trabajando para conocer el origen del agua, que es el problema que tienen en este momento los regantes para tener la Albufera en condiciones».
«La cantidad de agua que va a llegar parece ser que es positiva, lo que no conocemos es la calidad de ese agua. De lo que se trata es de que sea la mayoría de río y no de depuradoras, en función de los elementos que llevan químicos y que puedan no favorecer a la Albufera. Estamos en ello, trabajando en ello», ha planteado la primera edil.