Este ave rapaz, especie protegida cuya población total es de 940 parejas en Europa, verá su expansión favorecida por el aumento de la temperatura y la reducción de las precipitaciones causadas por el cambio climático en la Península Ibérica, ha explicado la Fundación Migres, coautora del trabajo, en un comunicado.
El informe predice que esta especie de águila aumentará su presencia en Andalucía, actualmente uno de los bastiones más importantes donde se encuentra el 35 % de la población total de Europa, y colonizará nuevos territorios como la Comunitat Valenciana, Aragón, Cataluña y Castilla-La Mancha.
Los cambios del clima están alterando algunos sistemas físicos y biológicos, han señalado desde la Fundación, además de que la temperatura es uno de los factores que más influye en la distribución geográfica de las aves.
Con el modelo de predicción que han utilizado en su investigación pueden conocer el efecto del cambio del clima sobre las especies, y ver las zonas donde se van a producir cambios ambientales que les afecten. No todas las especies se verán favorecidas y el informe también señala que en otras como el urogallo el efecto del cambio climático será negativo.
Este estudio ha sido realizado en colaboración con la Universidad de Málaga y será publicado en la revista científica Plos One.