El Parlamento de Cataluña ha aprobado la declaración soberanista este mediodía con la que inician el proceso de desconexión de España con los votos de Junts pel Sí y la CUP. Los independentistas pretenden con esta resolución iniciar en un plazo de treinta días “la tramitación de las leyes del proceso constituyente, de seguridad social y de hacienda pública”. De esta forma el Parlamento catalán ha dado un paso al frente para lograr “la desconexión democrática” del resto de España. Además, han advertido de que a partir de ahora no se tendrán en cuenta las decisiones de las instituciones del Estado español, y más en concreto, las del Tribunal Constitucional.
Los partidos rupturistas se sienten suficientemente legitimados para iniciar este proceso a pesar de que no lograron la mayoría de votos en las pasas elecciones, aunque sí la mayoría de escaños. Aunque, en palabras de Raül Romeva, número uno de Junts pel Sí, “se cuente como se cuente, en votos o en escaños, el resultado de las elecciones expresa una voluntad clara, incontestable”. Con esta resolución se pretende empezar a trabajar ya en el camino que terminará con la independencia de Cataluña. Además, Romeva ha añadido que “si no es hoy, será mañana, ha llegado la hora de ir a por todas”, haciendo referencia a la probable suspensión que aprobará el Tribunal Constitucional. Por su parte, Anna Gabriel, diputada de la CUP, ha cargado contra la Constitución afirmando que se trata “un acto de ruptura con la legalidad española” ya que “el Estado español no nos representa”.
Al acabar el pleno, los once diputados del PP han exhibido banderas españolas y catalanas para mostrar su rechazo a la declaración de independencia. Mientras que los de Catalunya Sí que Es Pot han mostrado unas cartulinas en las que se leía la palabra referéndum. La postura de este partido ha sido la de a favor del referéndum y en contra de la independencia ya que consideran que “no se puede construir sin dar la voz al pueblo de Cataluña”, por lo que esperan que sea en 2016 cuando se pueda realizar el referéndum. Por su parte, Inés Arrimadas, de Ciudadanos, ha calificado de “locura” la aprobación de esta resolución. Para Ciudadanos “estamos ante el mayor desafío a la democracia de los últimos 30 años” y ha recordado los casos de corrupción de Convèrgencia. Miguel Iceta, del PSC, considera que “se perdió el plebiscito del 27 de septiembre y el objetivo de la legislatura ha de ser otro”, mientras que Xavier García Albiol, el líder del PP catalán, se ha dirigido a Romeva para avisarle de que ni él ni nadie va a expulsar a los catalanes de España.
Ante esta resolución, Mariano Rajoy, presidente del Gobierno, ha afirmado que pedirá la suspensión de la resolución de forma automática y solicitará al Tribunal Constitucional que comunique que la iniciativa aprobada no puede tener ningún valor ni puede tener ninguna consecuencia. Además, ha informado de que se reunirá de forma inmediata con el jefe de la oposición, Pedro Sánchez, el próximo martes en La Moncloa. Rajoy ha subrayado que “el Gobierno no va a permitir que esto continúe” y que están “decididos a utilizar todos los medios que el Estado de Derecho ha puesto a disposición de la democracia para defender la propia democracia. Utilizaremos solo el Estado de Derecho, pero todo el Estado de Derecho. Solo la ley, pero toda la ley. Solo la democracia, pero toda la fuerza de la democracia”.
Texto por Dani Font