El pleno de las Corts ha rechazado este jueves, con los votos en contra del PP, las peticiones realizadas por los tres grupos de la oposición para crear una comisión de investigación sobre el accidente de Metrovalencia del 3 de julio de 2006, en el que fallecieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas.
El PSPV, Compromís y EUPV han solicitado esta comisión tras la decisión de la Audiencia de Valencia de reabrir la investigación. Por su parte, el diputado ‘popular’ David Serra ha destacado que la justicia ha dicho «claramente» que el motivo del accidente fue «el exceso de velocidad» y ha asegurado que el PP está «al lado de las víctimas». «Pregúntele a las víctimas si se sienten protegidas», le ha contestado la portavoz de EUPV, Marga Sanz.
Algunos miembros de la asociación de víctimas han seguido el debate de este punto del orden del día desde la tribuna de invitados. Por su parte, el presidente de las Corts, Juan Cotino, ha abandonado el hemiciclo cuando iba a comenzar el debate sobre este tema. La oposición ha criticado su ausencia y, al respecto, Marga Sanz, ha destacado la «relación directa» de Cotino con este tema.
Asimismo, el socialista Francesc Signes ha señalado el presidente de las Corts está «omnipresente en todas las tropelías del PP, y ya debería haber presentado su dimisión», mientras que el parlamentario de Compromís Juan Ponce ha indicado que «Cotino ofrecía puestos de trabajo –a familiares de las víctimas– para que no denunciaran».
Los grupos de la oposición han pedido al Consell y al PP que asuman sus «errores» y sus «responsabilidades» y han tildado de «paripé» y «farsa» la comisión de investigación que se celebró en 2006 sobre el accidente del metro. También han denunciado «amaño» de respuestas y «ocultación» de informes. Así, Signes ha acusado al diputado ‘popular’ Rafael Maluenda, que fue el presidente de esa comisión, de «vetar la participación de los peritos presentados por las víctimas».
Signes, quien ha asegurado que el accidente «hubiera podido evitarse con una baliza de 3.500 euros», ha pedido a los miembros del Consell y a los diputados del PP que «por ética, por salud informativa y por decencia política, asuman sus errores y digan que en esos momentos la visita del Papa era lo más importa para su Gobierno y, por eso, arrinconaron y escondieron el accidente».
Asimismo, Juan Ponce ha pedido que no se «victimice nuevamente a las víctimas» y ha hecho hincapié en que una comisión de investigación sobre el accidente del metro «es imprescindible, obligatoria para devolver la dignidad a esta cámara, está más que fundamentada y la exige la opinión pública desde hace mucho tiempo».
«RESPONSABILIDADES POLÍTICAS, TÉCNICAS Y MORALES»
Del mismo modo, Marga Sanz ha subrayado que el Consell y Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) «tienen responsabilidades directas, políticas y técnicas, por no haber puesto las medidas necesarias para evitar el accidente», así como también «una responsabilidad moral por no investigarlo en profundidad».
«Si hay algo que aclarar, que se aclare y que se depuren todas las responsabilidades», ha manifestado David Serra. Los grupos de la oposición, en la segunda intervención, han subrayado que lo que buscan con esta comisión de investigación es que se depuren responsabilidades políticas, independientemente de las penales.
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