El precio de la cultura

 

En plena campaña estival nos hemos preguntado cuánto cuesta conocer el patrimonio de la ciudad de Valencia. La Catedral, la Basílica, el Miguelete, la Plaza Redonda, la Lonja, el Mercado Central y las Torres de Serrano son los monumentos imprescindibles, ubicados en el centro histórico, que todo turista visita cuando pisa la capital del Turia. En VLC NEWS hemos salido a la calle a conocer de primera mano ¿cuánto cuesta? y ¿qué piensan, turistas y residentes en la ciudad, de los precios de acceso a los monumentos?.

Visita por el centro histórico de la ciudad, precios populares

La primera parada de nuestro recorrido es la Plaza de la Reina y adyacentes. En esta ubicación encontramos tres monumentos que todo turista que vienen a Valencia visita: la Basílica, la Catedral y el Miguelete. En la puerta de la Basílica la gente se amontona para acceder a la templo. Visitar la Real Basílica de Nuestra Señora de los Desamparados es gratuito. Los turistas asombrados se adentran en ella y visitan, pese a estar realizándose misas, el espacio. Fotografían sus frescos y admiran la sagrada imagen de la Virgen. Si el visitante quiere ir más allá, y conocer el patrimonio material del templo, puede visitar el Museo Mariano, en el que hay que pagar una entrada de 2€.

Dejando la Basílica a un lado, cámara de fotos colgada al cuello, vamos a visitar la Catedral de Valencia donde en ella podemos observar, entre otras maravillas, el Santo Cáliz. En esta ocasión, acceder al inmueble cuesta 5€, eso sí: con audioguía incluida en el precio de la entrada. En la puerta de acceso se agolpan turistas que esperan conocer los secretos de la Catedral valenciana.

“No me parece caro –comenta Juliette, turista francesa que es la segunda vez que visita Valencia- lo único que no me parece bien es que no incluyan la entrada a el Miguelete. Si me cobraran por ambas cosas 6€ no me importaría, pero al hacerlo en entradas diferentes no voy a subir a la torre”.

Y es que, pese a que el Miguelete es la torre de la Basílica las entradas son independientes. Se puede optar por visitar una o otra cosa, previo pago, pero no se dispone de una entrada que englobe ambos monumentos. Quizás es porque la audioguía no tiene cobertura a tanta altura. El precio por subir a la torre es de 2€.

En comparación con otras ciudades españolas, que tienen monumentos de las mismas características, visitar la Basílica y el Miguelete (5 + 2 = 7€) es más barato que visitar la Catedral de Sevilla y la Giralda (ya que la entrada, que incluye ambos lugares, tiene un precio de 8€) pero más caro que dar una vuelta por la Catedral de Mallorca (que cuesta 4€ y, aunque no tiene campanario anexo, incluye la entrada a su Museo).

Al salir de nuestra visita por la Catedral nos encontramos a una vecina de Valencia que pretendía visitar el templo con su nieta pero al ver que la entrada costaba 5€ ha decidido no entrar. “Por este precio me voy a tomar un helado o pago un poco más y me voy al cine con la niña –nos dice señalando a su nieta- Me parece un poco abusivo el precio. Creo que la gente de la ciudad no deberíamos pagar por visitar nuestro patrimonio. Es abusivo” comenta entre dientes María López, vecina del Cabanyal. Se interrumpe la conversación al ver como otro grupo de fieles decide dar la vuelta al ver el cartel, en la entrada de la Catedral, con la tarifa de visita.

“Muy fuerte, se han pasado. ¿Desde cuándo la fe tiene precio?” comenta en voz alta uno de los visitantes que ha decidido no entrar al templo.

Y entre turistas, contentos por un precio nada desorbitado, y residentes y fieles que piensan que es abusivo el precio de la entrada emprendemos rumbo al resto de monumentos del centro histórico. La Plaza Redonda, al ser una zona comercial al aire libre, no cuesta dinero visitarla. El Mercado Central es de entrada libre, y el gasto no va más allá de lo que el visitante decida gastar en productos gastronómicos que allí se venden pero la Lonja de la Seda de Valencia cuesta 2€, un precio más que aceptable. Eso sí, los domingos y festivos su entrada es gratuita. Para concluir nuestro recorrido por los lugares imprescindibles del centro histórico nos acercamos a los alrededores de las Torres de Serrano; es acceso es gratuito pero la verdad es que poca gente se anima a subir a ella y prefiere fotografiarla mientras toma un refresco en los bares de alrededor del monumento.

Conocer el casco antiguo de la ciudad y visitar sus monumentos más significantes (Basílica, Catedral, Miguelete, Plaza Redonda, Mercado Central, Lonja y Torres de Serrano) tiene un coste de 9€. Nada caro en comparación a ciudades como París o Roma. 

Visitar la Ciudad de las Artes y las Ciencias, no apto para todos los bolsillos

Emprendemos rumbo a otro de los focos más activos de turismo, la Ciudad de las Artes y las Ciencias. La página Web de Turismo de Valencia ofrece promociones online y visitar todo el complejo nos puede salir por alrededor de 37€. Estas ofertas incluyen la entrada al Hemisfèric, el Museo de la Ciencia y el Oceanogràfic (un precio bastante aceptable ya que por separado las entradas oscilan desde los 9€ por visitar el Hemisfèric o el Museo hasta los 28€ que cuesta la entrada, solamente, del Oceanogràfic) Nos damos una vuelta por el recinto y vemos a muchos turistas, residentes y visitantes paseando por sus instalaciones.

“Solo hemos venido a pasear no vamos a entrar a ningún sitio. En otro viaje que hicimos a la ciudad entramos al Oceanogràfic pero esta vez no iremos. Tampoco vamos a pagar por ver el Museo de la Ciencia ni el Hemisfèric por dentro. Hemos venido a pasear y hacernos unas fotos” comenta Mariano Rodríguez, que viene de Madrid con su familia a Valencia a pasar unos días.

La mayoría de los visitantes con los que nos cruzamos tienen el mismo objetivo que la familia Rodríguez: visitar las instalaciones, hacer fotografías y pasar un rato agradable en los parques de alrededor del recinto. Solo algunos de los turistas dice que “puede” que visite el Oceanogràfic “si los niños se ponen muy pesados” pero creen que el precio es bastante elevado.

Para hacer un símil con otras instalaciones de estas características nos tenemos que trasladar hasta Barcelona, allí podemos visitar el Aquarium Barcelona. La entrada a este recinto tiene un precio de 15€ la entrada de niños y 20€ para los adultos. La gente que ha visitado ambas instalaciones considera que no se pueden comparar, que son cosas diferentes, pero aun así les resultan caras ambas. 

En conclusión, visitar el casco antiguo y los monumentos Patrimonio de la Humanidad podríamos considerarlo turismo ‘low cost’ en comparación a la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Vanguardia y tradición en esta ocasión no comparten los mismos cánones de precios populares y accesibles. Quizás por eso, durante nuestra visita, hemos visto el centro de la ciudad a rebosar de visitantes, mientras que en el complejo de ocio nos hemos cruzado con familias, residentes y visitantes que sacaban fotos del recinto. 

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