El Palacio de Congresos de Valencia este sábado es el altavoz de los socialistas en su Conferencia Autonómica cuyo objetivo es reunir a los candidatos en un gran acto preelectoral. En esta jornada matinal, Joan Calabuig, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Valencia y candidato a la Alcaldía, ha hablado de la relación de la Comunidad Valenciana y Cataluña. El valenciano reconoce que no quiere fronteras.
Calabuig ha criticado los proyectos que «dividen la sociedad» y que buscan «enfrentar». «No aceptamos que nos quieran dividir, entre cristianos, musulmanes, judíos o no creyentes; entre los que nacieron aquí y los que no; entre una supuesta casa y la lucha por un pueblo; y entre los que son catalanistas o no catalanistas».
El portavoz del PSPV en el consistorio valenciano ha agradecido al candidato socialista de Cataluña, Miquel Iceta, el «gran trabajo» que realiza en su comunidad y ha destacado: «Entre nosotros y vosotros no queremos fronteras. Nunca las hemos tenido ni las queremos tener». «Queremos seguir trabajando juntos todos los socialistas españoles, sintiéndonos orgullosos porque hemos hecho juntos los mayores avances sociales y democráticos que ha habido», ha apostillado.
TEMAS ESTA JORNADA: LA ÚNICA ALTERNATIVA AL PP
Con la meta de preparar el programa socialistas de cara a las próximas elecciones, el secretario general, Pedro Sánchez, ha convocado a todos los candidatos autómicos del partido. Cabe destacar, no obstante, las ausencias de de la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ausente por una gripe, y de la navarra María Chivite, por encontrarse en la recta final de su embarazo.
Aquí, en Valencia, el anfitrión de la cita, el secretario general del PSPV, Ximo Puig, ha asegurado que no le «preocupa» que los ciudadanos se manifiesten en las calles, porque cree que es positivo que «tomen decisiones en el ámbito de la política». Además, ha subrayado que su partido «no ha perdido el pulso ni en las instituciones ni en la calle» y ha añadido que «no se trata sólo de denunciar, no se trata sólo de gritar, se trata de dar propuestas y soluciones a la gente».
Varios dirigentes del PSOE han alertado, ante la marcha convocada por Podemos en Madrid, que la gente necesita «menos gritos, menos voces y más ideas» y ha recalcado que los socialistas van a celebrar también este sábado «una manifestación» en Valencia que tiene como «intención clara» la de «construir un proyecto alternativo al del PP».
Los dirigentes territoriales del PSOE han afirmado que su partido no tiene problemas de «unidad interna» y han defendido que están «fuertes» en torno a un proyecto que quieren mostrar este fin de semana en esta reunión con el que quieren mostrar que son la alternativa al PP.
El candidato a la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha reconocido que les hubiera gustado que Susana Díaz estuviera en la Conferencia, pero ha recalcado que están todos los socialistas andaluces y ha defendido que todos van a aportar «lo mejor desde su ámbito» para «ofrecer una propuesta real de cambio seguro» a los españoles.
El líder de los socialistas extremeños, Guillermo Fernández Vara, ha subrayado que acuden a Valencia «no a hablar de personas, sino del proyecto con el que el PSOE va a intentar ganar las elecciones», convencido que es el único que puede garantizar la defensa de la igualdad de todos los españoles y de que el cambio pasará por su partido. «No hay posible alternativa al PP que no sea del PSOE o con el PSOE», ha remachado.
EL PRESIDENTE ASTURIANO: «SOMOS EL ADVERSARIO DE TODOS LOS PARTIDOS»
En su discruso, el presidente de Asturias, Javier Fernández, ha afirmado que la «estrategia» del PP ante estas elecciones es «mucha coleta en televisión para fragmentar al centro izquierda» y ha avisado a los suyos de que van a tener que combatir «dos miedos» entre los que les están «cercando»: los ‘populares’ acusándoles de «radicalización» y Podemos, hablando de su «moderación».
«Nuestro adversario es el PP, entre todos los partidos, pero somos el adversario de todos los partidos», ha insistido el presidente asturiano, que ha lanzado también ataques a Podemos. Así, ha avisado de que la izquierda que dice defender la justicia, el socialismo y la libertad «no se puede plantear soluciones mágicas, inmediatas y brillantes», pasar «del rupturismo radical en seis meses al reformismo moderado».