El tráfico de drogas y el bloqueo de licencias acaparan el debate del Marítimo

 

 

Siete distritos celebrarán el próximo lunes, 9 de diciembre, plenos (ordinario y extraordinario) de sus juntas municipales: Tránsitos, Ruzafa, Patraix, Marítimo, Exposición, Ciutat Vella y Abastos. La convocatoria de todos ha coincidido con la celebración de la sesión extraordinaria solicitada por la asociación de vecinos del Cabanyal-Canyamelar, que optó por la recogida de firmas para lograr la reunión con los representantes políticos, «siendo conscientes de que no representamos a la totalidad de los residentes».

Las diferencias entre el resto de plenos y el del Marítimo son notables. Además del procedimiento para la convocatoria, tendrá lugar a las 19 horas, mientras que el resto será a las 16 horas, según refleja la relación de actividades de los Consejos en la web municipal. Pero también será El Cabanyal y sus problemas los que van a acaparar la cita, sin opción a que el resto de barrios que forman el distrito puedan intervenir. El orden del día establecido, a petición de los residentes del barrio, avalado por la recogida de 2.053 firmas y respetado por el Consistorio en su totalidad, es claro en solo cuatro puntos: 

Solicitar todo tipo de explicaciones sobre el estado de paralización en que se encuentra nuestro barrio y las soluciones que tiene previstas el Ayuntamiento con relación a:

a) Ocupación ilegal de viviendas y falta de respuesta a la denuncia presentada por la Asociación de Vecinos. Situación actual y actuaciones que se están llevando. 

b) Justificación del incumplimiento de las promesas del Plan +Cabanyal. 

c) Justificación de los criterios en la concesión y suspensión de permisos para la ejecución de obras y otras actuaciones urbanísticas.

d) Solicitud de dialogo y consenso municipal con organizaciones representativas del barrio, para el cumplimiento de la orden ministerial.

La permanencia de ‘okupas’ en viviendas y el tráfico de drogas es uno de los factores principales que los vecinos destacan como culpables de la degradación, dando lugar a «una percepción de peligrosidad, lo cual va en contra de los intentos de revitalización del barrio», explican. Se trata de alrededor de 60 inmuebles ocupados y donde se desarrollan estas prácticas que, «sin la intervención municipal es imposible la de la Policía Nacional», continuan. 

Los vecinos quieren, además, pedir explicaciones al Consistorio sobre la «la retención de licencias de actividades en el barrio que nada tienen que ver con la prolongación o no». Alcanzan ya las 30 para la apertura de negocios, la rehabilitación integral de edificios protegidos y la reforma de interiores de viviendas, principalmente. 

«Sabemos que el Ayuntamiento no se pondrá a trabajar en el Pepri hasta que no tenga una instrucción política de instancias superiores, pero lo que nos gustaría y así lo vamos a reclamar es que esta vez sí se nos tenga en cuenta en el proceso de diálogo, no como se quedó en el aire el pacto de Units pel Cabanyal, en que no se nos tuvo en cuenta», comentaron desde la asociación de residentes. 

La agrupación sumará a los temas citados las preguntas que quedaron por contestar en la última sesión, hace dos meses, al presidente de la Junta de distrito del Marítimo, el concejal Cristóbal Grau, tal y como indican los vecinos. «Nos dijo que las trasladaría a las delegaciones correspondientes y seguimos a la espera», dicen. 

Sin embargo, pueden ocurrir dos cosas: que el edil y las personas del equipo de Gobierno que le acompañen quieran dar respuesta y entrar en diálogo con los intervinientes; o que tomen nota de lo planteado y se comprometan a responder por escrito. 

Es probable que a Cristóbal Grau le acompañen Alfonso Grau , concejal de Gestión delegada del Plan del Cabanyal, Alfonso Novo, concejal de Urbanismo, y Miquel Domínguez, concejal de Seguridad Ciudadana, entre otros, además de miembros de la oposición. 

Sea de una u otra forma, los vecinos auguran una participación multitudinaria. No en vano han difundido un evento a través de una red social a la cual hay invitadas más de 4.000 personas y aseguran que en las últimas convocatorias, plenos ordinarios, «se llena el aforo del local, de unas120 personas». Aunque solicitaron realizar la sesión en el Ateneo Marítimo para acoger a mayor número de personas, se les fue denegado. 

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