Generalitat y Ministerio aplicarán medidas contra la sequía

La Generalitat y el Ministerio de Agricultura llevarán a cabo actuaciones para paliar los efectos de la sequía en la Comunitat Valenciana, según ha explicado en la rueda de prensa posterior al Pleno del Consell la nueva portavoz, María José Català.

El Consell ha logrado que el Ministerio aplique prácticamente la totalidad de las propuestas realizadas por la Conselleria de Presidencia y Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua.

Así, el Gobierno central se ha comprometido a hacer frente al coste total de los avales de la Sociedad Anónima Estatal de Caución Agraria (SAECA), el importe íntegro de la moratoria de un año de intereses sobre los préstamos de incorporación y modernización, además de gestionar las reducciones del IRPF y la Seguridad Social.

Del mismo modo, el Ministerio también va a crear un grupo de trabajo con las comunidades autónomas para estudiar posibles ayudas dirigidas a apoyar a los agricultores afectados por la muerte de árboles en sus explotaciones y coordinará, junto a las confederaciones hidrográficas de las zonas afectadas, la regulación y el uso de los pozos de sequía.

Por su parte, la Generalitat hará frente a una parte, alrededor del 2%, de la bonificación de los intereses en los préstamos avalados por SAECA, realizará obras de emergencia y post-trasvase, y agilizará y flexibilizará los requisitos para el cobro de de ciertas ayudas enmarcadas en la Política Agrícola Común.

Cabe recordar, asimismo, que los agricultores de la Comunitat son beneficiarios de la iniciativa de la Generalitat de destinar ayudas, por valor de 25 millones de euros, para la suscripción de seguros agrarios del Plan Nacional de Seguros Agrarios Combinados.

Esta iniciativa, que no desarrollan otras comunidades autónomas, busca poner a disposición de los agricultores y ganaderos una herramienta básica que aporta seguridad y confianza al sector agrario de la Comunitat Valenciana frente a los riesgos meteorológicos, como la actual sequía, las heladas y los vientos fuertes, que pueden deteriorar la calidad de la producción.

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