La Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) estudiará a partir del próximo mes el informe que el Consell Jurídic Consultiu (CJC) dictaminó sobre la definición que hace del valenciano en su diccionario, pues, según el vicepresidente de la Academia, Josep Palomero, sería «una descortesía no hacerlo».
Palomero ha explicado que la institución todavía no ha comenzado a estudiar el documento del Consell Jurídic remitido por la Conselleria de Educación y Cultura, en el que se considera «extravagante», desde el punto de vista jurídico, la definición de valenciano que hace la Acadèmia porque «se extralimita de sus funciones».
A lo largo de 32 páginas, el CJC subraya el reconocimiento “histórico, estatutario y legal” del valenciano y analiza la naturaleza jurídica y competencias de la Acadèmia. En este sentido, sostiene que, “como institución de la Generalitat está sometida, estrictamente, a las competencias concretas que le reconoce el Estatuto y su Ley de creación, sin que en ningún caso pueda excederse o extralimitarse de estas atribuciones”.
Interpelado por si la entidad debe estudiar un dictamen que es jurídico, ha indicado que, al haberlo remitido la Conselleria, «sería una descortesía no estudiarlo porque en el oficio de remisión la consellera plantea que lo estudiemos y veamos qué es lo que hay». «Es trabajo de la AVL aceptar con toda cortesía y naturalidad el estudio de un dictamen que nos llega por la vía de los poderes públicos», ha indicado.
Palomero ha manifestado antes de su intervención en la jornada «El reto de la escritura: de los archivos y las bibliotecas a la nube» en la universitat de Valencia que «a partir del mes que viene, cuando se haga la remodelación de las secciones de la AVL, alguna de ellas será la encargada de empezar a estudiar ese extraordinario informe», aunque ha asegurado «que llevará su tiempo», pues el diccionario ha tardado más de una década en terminarse.
«Publicidad fantástica»
El vicepresidente de la entidad ha recalcado que el Diccionari está colgado en la web de la AVL y ha subrayado que tiene «más de 170.000 entradas en una semana», por lo que ha ironizado con la «publicidad fantástica» que han recibido «por parte de todo este proceso».
Sobre la actividad de la AVL, ha explicado que precisamente este pasado jueves se reunió la Comisión del Diccionari y estableció un plan de trabajo «para los próximos años» por lo que con lo que «estamos trabajando como siempre». En esta línea, ha confirmado que aún no se han pronunciado sobre el dictamen del CJC y ha apuntado que les costó 12 años hacer el Diccionari, por lo que «esto llevará su tiempo, como es natural».
Al respecto, ha incidido en que el Diccionari está aprobado «por el pleno de la AVL» lo que «no quiere decir que, como cualquier obra científica, esté abierta a nuevas aportaciones y revisiones incluso mecanográficas». Preguntado por si no se podría considerar una descortesía dejar aparcado el dictamen, ha hecho hincapié en que no se aparta sino que se ha recibido y se estudiará «con mucha atención».