Los grupos de la oposición en el Ayuntamiento -PSPV, Compromís y Esquerra Unida- pidieron este viernes la celebración de un pleno extraordinario sobre el estado de la ciudad en el que se analice la situación política, económica y social de la capital valenciana.
El portavoz del grupo municipal socialista, Joan Calabuig, aseguró en un comunicado que la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, «huye del debate y la confrontación porque no tiene respuesta a la emergencia social que vive Valencia, donde hay más de 100.000 parados».
Los tres grupos registraron una petición para que se celebre este pleno porque, según Calabuig, Valencia «vive una situación de anormalidad democrática porque quien dirige el ayuntamiento no rinde cuentas desde el 12 de enero de 1994, cuando se celebró el último debate sobre el estado de la ciudad en el que Barberá participó».
«No queda ninguna ciudad importante, en España ni en Europa, que en la que quien ocupe la Alcaldía no se someta a controles», remarcó el portavoz socialista.
Según Calabuig, la ciudadanía «tiene derecho a saber qué se puede hacer para combatir el paro y qué sucederá con los presupuestos de la Generalitat. Llegaremos a 2015 con un mandato perdido porque no culminará ninguno de los grandes proyectos de la ciudad», ha advertido.
También reclamó que se «despejen todas las sospechas sobre los casos de corrupción que salpican al gobierno municipal y pidió a Rita Barberá que «no se esconda detrás de su silla para evitar dar explicaciones» e «impedir que la oposición tenga derecho a réplica».
«El equipo de Gobierno está congelado en el tiempo», puntualizó y adelantó que su formación «no se presentará con las manos vacías» al debate del estado de la ciudad.
Por su parte, Compromís considera fundamental que se convoque el debate porque «los políticos tenemos la obligación de intercambiar opiniones y propuestas y hacerlas llegar a los ciudadanos para solucionar los problemas».
«En el debate expondremos nuestro modelo de ciudad frente al modelo del Gobierno conservador de Rita Barberá», señala en un comunicado Compromís, que presentará propuestas en torno a la Transparencia y participación, la economía, el urbanismo y medio ambiente, la movilidad sostenible y la cultura y patrimonio.
Por su parte, el portavoz del grupo de Esquerra Unida, Amadeu Sanchis, ha asegurado en un comunicado que es imprescindible celebrar el debate «ante la parálisis de Valencia»
Sanchis señaló que su formación se basará en remarcar que la ciudad se encuentra «en una situación económica mucho peor que el año pasado, donde las consecuencias de los recortes realizados tanto por la Generalitat como por el gobierno central han incrementado los niveles de desempleo, desigualdad y pobreza».
El portavoz municipal anunció que EUPV entregará a Barberá una «batería de propuestas que permita limitar al máximo los efectos de la crisis y abrir una alternativa de gobierno seria y responsable y que entendemos que sólo puede ofrecer la izquierda alternativa al sistema».
«Choca contra un muro»
Por su parte, el vicealcalde, Alfonso Grau, afirmó que el portavoz socialista, Joan Calabuig, está «desesperado» porque ha vuelto a «chocar con el muro infranqueable» de la honradez de la alcaldesa, Rita Barberá,
Grau criticó a Calabuig, quien en su opinión «no tiene proyecto de ciudad» y su única línea de actuación es «lanzarse continuamente» contra la alcaldesa y «denostar todo aquello que pueda ser bueno para Valencia».
«Además, a los socialistas, como no les interesa nada lo que puede ser bueno para Valencia, cuando hay alguna noticia positiva como que en los Presupuestos Generales del Estado se recoja una partida de 4 millones de euros para el soterramiento de las vías en Serrería, sin ningún rubor tergiversan los datos y mienten para tratar de manipular a la opinión pública», manifestó.
En su opinión, Calabuig «ha vuelto a chocar con su honradez, con su trabajo del día a día, con su esfuerzo por transformar a Valencia por una ciudad que hoy por hoy refleja el resultado de toda esa labor».
Grau calificó de «lamentable» la situación del PSPV, «roto y maniatado por dos partidos políticos radicales que no respetan las señas de identidad de los valencianos y que abrazan movimientos que quieren romper España», en referencia a Compromís y EU.
Respecto a las acusaciones de falta de participación, Grau recordó que el debate político en el Ayuntamiento es «diario, continuo, abierto, democrático y se fomenta».
«En este Ayuntamiento todos los meses hay un debate abierto que ofrece la oportunidad de presentar mociones y preguntas para plantear propuestas y alternativas, pero Calabuig se ocupa más de su propio liderazgo que de lo que realmente preocupa a los valencianos», agregó.
A su juicio, el problema está en que «al tripartito de la oposición no le interesa el debate constructivo sobre la ciudad porque piensan que no es útil para sus intereses electorales».