Han pasado 35 años desde que el patriarca de la familia Shaw, Stephen, recalara en Valencia y decidiera abrir el primer restaurante chino de la ciudad. Tenía nombre de mujer, el de la suya, ‘May-Lin’. Con él llegó el revuelo por la entrada de la cocina asiática en la capital del Turia, mirada con recelo y cierto respeto. Solo Madrid y Barcelona contaban con restaurantes de este tipo, de hecho hasta allí debía ir la familia a proveerse de alimentos para poder elaborar sus platos. Pero su excepcionalidad y carácter pionero en la ciudad hizo que pronto pasaran por sus mesas personajes de relevancia social y política de nuestra historia.
Nada tiene que ver aquella época con la actual. Shaw abrió camino a los futuros negocios que llegaron y que tienen hoy cabida y desarrollo aquí y, también, dio ejemplo de integración entre culturas y difusión de la propia a través de su cocina.
Tras ‘May-Lin’ llegaron otros restaurantes, con otros nombres y otras ubicaciones dentro de Valencia, continuando el hilo familiar y es hoy cuando el heredero natural echa el cierre. Detrás de esta decisión hay una cuestión de salud, familiar y de negocio. Se trata de ‘Shaw’s House’, situado en la calle Císcar. Al frente está Simón, el hijo de Stephen y May-Lin (hasta ahora, la cocinera), que conoce el negocio bien ya que desde los 16 años es parte indispensable de él (ahora tiene 41).
En los últimos días se han sucedido los homenajes. Hay quien ha pasado por allí para cenar o comer sin conocer su historia. Pero sus asiduos y muchos gourmets han querido hacer su especial despedida, yendo por última vez a degustar sus platos que, suelen coincidir, «sorprende al paladar y no tiene nada que ver con lo que nos hemos acostumbrado a llamar comida china». Los últimos dos días el local ha permanecido abierto pero «para los amigos», explicaron en el restaurante, la mayoría, «clientes de toda la vida».
Una de las citas más especiales tuvo lugar la semana pasada, de la mano de Yelp, una comunidad de aficionados a la gastronomía que desde su plataforma on line que aglutina las referencias de restaurantes de todo el mundo. El portal tiene en Valencia también sede y sirve de orientación y guía para todo aquel que desee consultarlo y participar de él. De hecho, mueve a gran número de ciudadanos que a través de degustaciones van formando una gran familia. Parte de ella se dio cita hace pocos días en ‘Shaw’s House’, movidos por el proyecto llamado ‘GastroYelper Internacional’, que pretende recorrer restaurantes especializados en cocinas de otros países. «Movidos por su historia y sabiendo de su cierre, decidimos visitar ‘Shaw’s House’. Fijamos la fecha y la cena para darle la gran despedida que se merece, como negocio de referencia y como familia trabajadora y pionera».
Simón atendió personalmente al grupo, sirvió y explicó plato a plato, ingrediente a ingrediente y técnica a técnica, con un menú degustación que los Shaw trabajaron «con mucho cariño y una atención exquista», explicaron algunos de los asistentes. La cena transcurrió entre la tensión y la emoción de un local que rezuma historia, tenacidad y éxito y que se ve obligado a decir adiós.
Parece ficción hablar de una época en que la comunidad china no formaba parte de nuestra sociedad, sobre todo hoy en día en que cada vez más bares tradicionales son regentados por ella. En el caso de los Shaw, otras aventuras y otros negocios les esperan en Valencia. Simón ya trabaja en ello, no en vano su esposa está al frente de un negocio de manicura muy cerquita del local que ya no abrirá más a partir de hoy. Lleguen los que lleguen, seguro volverán a ser ejemplo de emprendedurismo, durabilidad y éxito.