El consistorio valenciano se puso sus mejores galas para recibir a las máximas representantes de la fiesta fallera en el año 2014. El acto de proclamación de las Falleras Mayores de Valencia arrancó con puntualidad, a las 19:00 horas y con la escalera principal del Ayuntamiento como escenario de lujo.
Junto a la escalera, representantes del cuerpo de la Policía Local, también ataviado para la ocasión, y junto a él la banda de música que amenizó toda la ceremonia con canciones tradicionales. Abanico en mano por el sofocante calor que Valencia sufría a esas horas -así lo resaltó la alcaldesa en su posterior discurso-, los asistentes disfrutaron de una tarde muy especial para el mundo fallero y para la sociedad valenciana.
El reloj marcaba las 19:10 horas cuando, acompañadas por la banda de música, la Corte de Honor Infantil comenzó a subir desde la calle de dos en dos por la engalanada escalera para saludar a Rita Barberá, que les esperaba en lo más alto de la escalinata. Una vez toda la corte ya había desfilado, fue el turno de Claudia Villodres, Fallera Mayor Infantil, que fue aplaudida por los asistentes y posó para los medios junto a la alcaldesa.
Minutos después, llegaba el turno de las Falleras Mayores. De nuevo en parejas, fueron subiendo entre aplausos. La ovación de la tarde llegó cuando Carmen Sancho, Fallera Mayor de Valencia 2014, subía escalón a escalón iba hacia donde se encontraba Rita Barberá.
El acto prosiguió en el hemiciclo de la Casa Consistorial donde la alcaldesa, ante todos los medios, familiares, instituciones, la Corte de Honor saliente, las Reinas de Castellón y Alicante, y demás invitados hizo entrar a las dos Cortes de Honor y acto seguido, proclamó oficialmente a Claudia Villodre y Carmen Sancho como Falleras Mayores de Valencia para el año 2014.
La alcaldesa, en su discurso del acto de proclamación de las nuevas máximas representantes de las fiestas patronales de la ciudad, indicó que las Fallas «son identidad, esencia e imagen de marca del pueblo valenciano, representan nuestras virtudes y nuestra forma de vivir y de sentir, simbolizan la vocación integradora de nuestra sociedad y el deseo común de compartir, y proyectan al mundo la realidad de esta tierra abierta, crítica, laboriosa, de ingenio y mediterránea».
Para Barberá, «más de ciento veinte mil ciudadanos de Valencia integran el mundo fallero y participan en la transformación festiva de la ciudad, y en el centro de todo ello os situáis vosotras, Carmen y Claudia, que amáis las fallas desde siempre, que habéis crecido con ellas y que hoy os proporcionan una de las mayores alegrías de vuestras vidas al ver cumplido un gran sueño».
También ha animado a las jovenes a que sean ellas mismas, «a que os mostréis como sois y a que compartáis esa extraordinaria alegría que poseéis con vuestras respectivas cortes de honor, las más fieles e incondicionales compañeras con las que tanto vais a vivir y a disfrutar». Tras el discurso, la sala entera se puso en pie y entonó el himno regional, emotivo como siempre y que hizo brotar lágrimas de los ojos de Carmen Sancho en su tramo final.