Pedro Sánchez será el nuevo secretario general del PSOE. Así lo ha decidido el 48,69% de la militancia socialista (casi 62.500 apoyos), que ha optado por su candidatura en una consulta única en la historia de la formación que hasta el congreso extraordinario del próximo fin de semana sigue liderando Alfredo Pérez Rubalcaba.
Sánchez, diputado por Madrid, ha arrasado en las elecciones a sus dos rivales: Eduardo Madina, que se quedó con un 36,19% de los votos, y Alfredo Pérez Tapias, 15,12% de los sufragios emitidos. Con un aval impresionante de Andalucía, donde el futuro líder socialista cosechó más del 61% de los votos, y el apoyo de la Comunidad Valencia, segunda federación en importancia para el PSOE, donde ganó más discretamente con el 45,66%, Pedro Sánchez se alza con el mando de un partido sumido en una importante crisis. Esa será su principal tarea: volver a hacer del PSOE una alternativa de gobierno.
Ante la amenaza de Podemos y el mordisco de votos de Izquierda Unida, el futuro líder ha prometido «cambiar el PSOE» para crear un partido «tan a la izquierda como la militancia de base» y que va a recuperar sus aspiraciones de gobierno, con un proyecto que «no caiga en populismo ni demagogia».
El diputado madrileño también ha tenido palabras para sus dos rivales, ha quienes ha agradecido el «coraje» de haberse presentado al proceso y con quien ha garantizado que quiere contar en su Ejecutiva.
Enhorabuena a @sanchezcastejon, próximo SG del PSOE. Y enhorabuena a cada militante de un partido que acaba de hacer historia.
— Edu Madina (@EduMadina) julio 13, 2014